Con el propósito de reforzar la seguridad en Puerto Rico, un grupo de oficiales del Departamento de la Policía de Orlando viajó ayer a la isla conmovidos por la devastación dejada a su paso por el huracán María.

La delegación, que está encabezada por uno de los subjefes de la Policía, Orlando Rolón, quien es un puertorriqueño natural de Bayamón radicado en centro de la Florida desde que tenía 11 años, quien manifestó su deseo de colaborar con el Negociado de la Policía.

“Son doce agentes. Hay personas que nacieron en Puerto Rico como yo, o se criaron o trabajaron en Puerto Rico y otros que no tienen ninguna conexión. Queríamos tener diversidad entre los miembros del departamento. Es algo muy especial para nosotros rendir nuestra labor de esta manera en el proceso de ayudar a Puerto Rico a levantarse”, comentó Rolón.

El funcionario, en entrevista con Primera Hora, reveló que fueron asignados al área policíaca de Carolina para llevar a cabo labores de patrullaje junto a los agentes estatales en las zonas norte y sur y en el municipio de Trujillo Alto, donde ya comenzaron a ver comunidades que todavía tienen el tendido eléctrico en el piso.

Su horario de trabajo es de 12 horas, es decir, de 6:00 a.m. a 6:00 p.m. Esta es la primera ocasión que el grupo viaja a Puerto Rico para ofrecer sus servicios.

Rolón no está ajeno a los problemas que confrontan los policías estatales al no tener tiempo para poder agotar los excesos de los días acumulados de sus licencias de vacaciones y enfermedad debido a la emergencia ocasionado por el paso de los fenómenos atmosféricos lo que ha provocado un aumento en las cifras de ausentismo.

“Nosotros comprendemos. Queríamos poder estar aquí y tomar la posición de un policía que no esté presente para ayudarlo mientras atiende las necesidades de ellos y de sus familias. Eso nos alegra mucho”, sostuvo el oficial.

Al mismo tiempo lamentó que al sistema de seguridad de la isla se haya visto afectado ya que en su caso el alcalde y sus comisionados dan prioridad con recursos y presupuesto a los departamentos de la Policía y del Cuerpo de Bomberos.

“Nos da pena cuando escuchamos las historias de cómo ha sido afectado el sistema de seguridad en Puerto Rico”, expresó Rolón.

El grupo regresa el 15 de diciembre a Orlando, pero estarían evaluando la posibilidad de regresar en enero del 2018 de acuerdo con la necesidad de sus servicios.

Su delegación no trajo a la isla vehículos, como agentes de otras jurisdicciones lo han hecho por las complicaciones que conlleva su transporte.

Próximamente, se harán gestiones con la Fortaleza para entregarle al gobernador Ricardo Rosselló Nevares una bandera firmada por el alcalde de la ciudad de Orlando, Buddy Dyer, empleados municipales y el grupo de policías como una muestra de su solidaridad y compromiso en ayudar a Puerto Rico.

El comisionado de uno de los distritos de Orlando, el puertorriqueño y expolicía Antonio Ortiz, también está haciendo gestiones para viajar a la isla, añadió Rolón.