Guayama. “Fueron unos cobardes al atropellarlo y dejarlo allí tirado”.

Así describió David Ramos a los responsables de arrollar a su hijastro Christian Mangual Lebrón, quien murió luego que fuera impactado por un four track y ser atropellado por otros en un evento en el barrio Pozuelo.

Este explicó que el joven de 19 años salió junto a un amigo a dar una vuelta en una motorita en una actividad de vehículos todoterreno realizado en un área de salinas cerca del mar.

Según la pesquisa policiaca, la motora que conducía Mangual Lebrón fue impactada por un four track y, al caer al piso, varios todoterreno le pasaron por encima, causándole serios traumas en la cabeza y el cuerpo, que le provocaron la muerte horas más tarde en el hospital San Lucas, en Guayama.

“Nos dijeron que había más de 600 four tracks, pero no sabemos nada más”, dijo el hombre.

Este describió al infortunado como un buen muchacho, dedicado a su trabajo en las fincas de tomates y comprometido con la familia que había iniciado hace ocho meses con su novia, Lisa Rivera.

“A los responsables, que se entreguen a la Policía y paguen por lo que le hicieron”, comentó Ramos.

Sobre los four tracks en las carreteras, este sostuvo que son muy negligentes porque no respetan las leyes y a las personas.

“Ellos mataron a un ser humano”, añadió el padrastro.

Su novia aún trataba de asimilar el duro golpe de perder a su compañero luego que hace un mes atravesara por el dolor de perder al bebé que ambos esperaban.

“Yo le dije que no fuera, pero me dijo que daba una vueltita y regresaba rápido... no fue así”, señaló Lisa.

Recordó que, como siempre estaban juntos, decidió ir en carro hasta el lugar para encontrarse, pero lo que jamás imaginó fue que se toparía con el incidente.

“Me llamaron y me dijeron que él había tenido un accidente, que estaba mal y que iban para el hospital”, indicó la joven de 19 años, quien prefirió ir de inmediato a verlo.

Manifestó que, cuando Christian llegó a la institución médica, ya estaba sin vida. Narró que verlo fue bien difícil, ya que tenía la cabeza bien hinchada, le salía sangre de los oídos y tenía golpes en todo el cuerpo.

“Lo voy a extrañar porque era bien cariñoso, era bueno y no tenía problemas con nadie”, insistió Lisa, quien se preparaba para hacer unas camisetas con la foto del joven para el día del sepelio.

“Primero perdí a nuestro bebé y ahora a él”, dijo afligida la joven, que les pidió a los responsables de quitarle la vida a Mangual Lebrón que acudan a la Policía y a los que vieron, que lo informen a las autoridades para que la muerte de Christian no quede impune.

El cuerpo será velado en la Funeraria De Pedro, en Guayama, tan pronto el Instituto de Ciencias Forenses (ICF) culmine con el proceso de autopsia.

Por otro lado, el sargento Pedro Torres, del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Guayama, destacó que aún no tienen pistas sobre el incidente.

“Nos encontramos entrevistando personas para ver si podemos esclarecerlo”, dijo Torres.

Asimismo, informó que desconocen qué entidad o grupo fue el organizador del evento, ni cuántos four tracks pudieron estar involucrados en el trágico suceso. Para cualquier información que pueda dar de forma confidencial, llame al 787-866-2020.

Primera Hora visitó el lugar, donde lo dejaron lleno de basura y aún estaba la ropa ensangrentada que llevaba el joven.

Allí, Ruth Collazo, portavoz de los vecinos, denunció que la actividad fue inesperada, ya que no conocían que se realizaría allí.

“Nos quitaron la tranquilidad, hicieron ruidos excesivos y no respetaron a nadie”, comentó la mujer.

De acuerdo con la Ley 22 de Tránsito, artículo 10.16, inciso N, se prohíbe el uso de four tracks en vías públicas.