A sus 12 años, un regaño sobre cortes de clases por parte del director de la escuela, aparentó ser el motivo por el cual un menor jugó con su vida, parándose al borde de un precipicio de sobre 40 pies de altura.

El niño reside en un hogar sustituto y actualmente el Departamento de la Familia investiga las posibles causas que lo llevaron a amenazar con su vida hoy, cuando se subió al segundo nivel de la Escuela Segunda Unidad Adam, que ubica en la carretera PR-2 del barrio Caimital Alto en Aguadilla, hasta donde llegaron la Policía, Emergencias Médicas y el Cuerpo de Bomberos para negociar con el menor.

“Se trepó en el área del aljibe y amenazó con lanzarse de ahí. Por el tipo de situación se activó el protocolo de negociación”, explicó el teniente Eduardo Rivera, subdirector del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Aguadilla, quien junto al sargento Jorge Cruz –negociadores certificados- llegaron al lugar para disuadir al menor.

Rivera sostuvo que el niño no hizo ningún tipo de reclamación en específico.

“Luego de aproximadamente una hora, se llegó a una negociación. La paramédico Denise Silva González estableció un vínculo con el menor y logró persuadirlo para desistir. Se utilizó una escalera de bomberos para llegar hasta él y finalmente logró bajarlo”, narró el teniente.

Se dijo que el menor logró treparse al aljibe utilizando una paleta de madera de carga y posicionándola como una escalera para subir, hasta alcanzar unas varillas que cuelgan de la estructura. De ahí se agarró y, haciendo esfuerzo, subió a la cima, que tiene una altura de sobre 40 pies de uno de los lados, por el declive del terreno.

“En un momento temimos que el viento lo lanzara al vacío, pues se paró bien cerca del borde. Creímos que lo perdíamos, pero afortunadamente no fue así”, concluyó Rivera.

Una vez en terreno seguro, las autoridades lo movilizaron hasta el hospital Buen Samaritano de Aguadilla para una evaluación médica.