Unos 403 confinados verían sus sentencias reducidas si se aprueban las enmiendas propuestas al Código Penal, que incluiría sanciones más bajas para las personas convictas de ciertos delitos.

Al favorecer el proyecto de ley con los cambios propuestos, el secretario del Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR), José Negrón Fernández, destacó que 403 reos -de una población que hasta el lunes sumaba 12,595 confinados- hubieran obtenido una sentencia menor con las enmiendas propuestas.

El Proyecto del Senado 1210 y su equivalente en la Cámara proponen enmendar 49 artículos del Código Penal del 2012, y Negrón Fernández precisó que en la actualidad cerca de 1,153 confinados cumplen sentencia por 20 de esos 49 artículos.

“En la medida que, con las enmiendas propuestas, un grupo de confinados que llegará al sistema correccional cumplirá sentencias más bajas, otros se beneficiarán de penas alternas a la reclusión, y otros tendrán la oportunidad de ser evaluados para los programas de libre comunidad luego de haber cumplido un mínimo de años de su sentencia, podemos concluir que el crecimiento gradual que ha observado la población confinada se verá, a mediano y largo plazo, reducido”, enfatizó el secretario durante una vista pública.

Negrón Fernández dijo ante los miembros de la Comisión Conjunta Permanente de la Asamblea Legislativa para la Revisión Continua del Código Penal que el nuevo enfoque de la legislación penal evitará problemas de capacidad en la instituciones carcelarias y les brindará a las personas convictas la oportunidad de rehabilitarse con el objetivo de que puedan insertarse luego a la libre comunidad.

No obstante, advirtió que el Código Penal debe enviar un mensaje contundente de cero tolerancia hacia los crímenes que atenten contra la vida, los menores de edad y las personas de edad avanzada.

El principio de favorabilidad instituido en el Código Penal permite que una nueva ley se aplique retroactivamente en aquellos casos en que favorezca a una persona imputada o convicta de delito. Bajo esa norma, si durante el término en que la persona está extinguiendo su sentencia se aprueba una ley más benigna con relación a la pena o al modo de ejecutarla, la legislación se aplicará retroactivamente.

Negrón Fernández enfatizó que la reducción en las sentencias no supondría que los reclusos saldrían de inmediato a la calle, sino que la extensión de su castigo sería menor.