La división de Homicidios en Carolina tiene las manos llenas con tres investigaciones de asesinato y otra de muerte sospechosa en hechos ocurridos entre el viernes y la noche del domingo.

La muerte violenta más reciente se registró anoche a las 7:00 p.m. en el sector Fruto Alemán, de Trujillo Alto. Allí, específicamente en el camino Isidoro Lolo Rivera, fue atacado a tiros frente a un negocio Antonio José Algarín Díaz, de 27 años. El joven, hijo de una policía del cuartel Carolina Oeste, fue llevado precisamente por su madre al Centro de Diagnóstico y Tratamiento de Trujillo Alto donde se certificó su muerte.

Agentes de Homicidios intentan reconstruir sus últimas horas de vida y realizarán entrevistas en el lugar donde vivía, a fin de corroborar información que llegó a los investigadores sobre el joven.

Mientras ese asesinato era investigado, personal de Homicidios y de la Defensa Civil colaboraba en la recuperación de un cadáver encontrado al fondo de un barranco en el sector La Condesa, del barrio Cubuy, en Canóvanas.

El cuerpo del hombre no ha sido identificado y tampoco se pudo determinar si presentaba signos de violencia ya que se encontraba en avanzado estado de descomposición. Cerca del cuerpo se ocupó un vehículo todo terreno.

 Ese caso, clasificado como una muerte sospechosa, lo trabaja la sección de Agresiones, que forma parte de la División de Homicidios.

 De otra parte, desconocidos abrieron fuego el viernes a las 10:47 p.m. contra Pablo I. Martínez Pastrana, de 34 años. El hombre se encontraba en la sala de su casa ubicada en Alturas de Campo Rico, Canóvanas, cuando le dispararon desde la calle.

 Martínez Pastrana, fichado en el 2007 por un caso de vehículo hurtado, fue ejecutado mientras su esposa se encontraba en el segundo piso de la estructura.

En el área no hay cámaras y los vecinos no han brindado mayores pistas para resolver el crimen, lo que complica la pesquisa.

Por otro lado, Edwin Ramos Castro fue asesinado a tiros ayer en la mañana mientras se encontraba en el interior de un auto Toyota Camry estacionado al lado de su casa en la calle Esther, de Villa Cristiana, Loíza.

Se supo que el hombre decidió dormir solo en el auto tras sostener una discusión con su pareja. Ramos Castro fue fichado en el 2010 por un caso de Ley de Armas.