Una docena de querellas de conductores que han sido víctimas de vándalos que han arrojado objetos contra sus vehículos cuando transitan en horas de la noche y madrugada por la carretera PR-165 entre Toa Baja y Cataño han sido presentadas en los pasados dos meses y medio.

Tan reciente como éste  sábado, en horas de la medianoche, se reportaron cinco  casos en la intersección de la carretera PR-165 con la calle Olivo.

Además,  otros dos casos ocurrieron en el puente peatonal de la misma carretera PR-165 y en el kilómetro 35.0 cerca del Parque de Bombas en Cataño. 

Esta situación sin control impulsó a la Policía a iniciar un plan de trabajo para intervenir con los individuos  que han lanzado piedras y bloques contra los vehículos de motor.

Según se detalló, en junio pasado  solo hubo una querella, pero en agosto los ataques se intensificaron reportándose con mayor frecuencia los miércoles, viernes y sábado en horario de 11:00 de la noche a 3:00 de la mañana. 

Como parte del plan se integrarán unidades de las policías municipales de ambas jurisdicciones para incrementar el patrullaje  y movilizar los recursos y tratar de  intervenir con los sospechosos, comentó  el comandante de área de Bayamón, coronel  José Ramírez.

Entre los querellantes figura el propietario de una guagua Dodge Durango, color rojo, del 2000, a la cual le lanzaron una piedra al cristal frontal y al bonete y el de un automóvil Nissan Versa, color blanco, el cual recibió los mismos daños. 

En uno de los casos, en el que un individuo lanzó una piedra ocasionándole daños a la puerta de un Honda CRV, del 2015,   e describió al  sospechoso como delgado, de 5’6” de estatura, que vestía una camisa azul y blanca con mahón oscuro.