La pareja imputada de asesinar a un bebé de 5 meses y luego colocarlo en un congelador de su casa renunció inesperadamente a la vista preliminar que se seguía en su contra.

Hoy debía continuar la vista ante el juez Enrique Silva Avilés, del Tribunal de San Juan, con el testimonio de un agente de la Policía y un funcionario del Sistema de Emergencias 911, pero antes del desfile de prueba los abogados de Xiomara Rodríguez Flores y José Mirada López informaron su decisión de renunciar al proceso.

Las abogadas Samari Benítez Santiago, Wilmari Pérez Quiles y Yaritza Torres Medina, de la Sociedad para la Asistencia Legal, representan a Rodríguez Flores

El abogado de oficio José Roselló Rivera representa a Miranda López.

“¿Eso es así?”, preguntó el magistrado a los imputados tras el planteamiento de la defensa.

“Sí, señor”, contestó Rodríguez Flores.

“Sí”, agregó Miranda López.

Luego de explicarles el alcance de su determinación, Silva Avilés encontró causa para juicio contra Rodríguez Flores, de 24 años, por dos cargos de maltrato de menores y un cargo de asesinato en primer grado por la muerte de su vástago.

Contra Miranda López, de 43 años, encontró causa para juicio por dos cargos de maltrato de menores y por un cargo de encubrimiento por ocultar la muerte del bebé de su pareja.

La lectura de acusación se celebrará el 12 de abril, mientras que el juicio debe empezar el 10 de mayo.

Antes de la renuncia a la vista preliminar y en un señalamiento pasado, el ministerio público -representado por las fiscales Deborah Benzaquen Parks, de la Unidad Especializada de Violencia Doméstica, Delitos Sexuales y Maltrato a Menores y Jimara Gabriel Maisonet- sentaron a testificar a los dos agentes del Cuartel de Puerto Nuevo que detuvieron a la pareja.

Pero quedaban varios testigos por declarar, como la patóloga Rosa Rodríguez y la fiscal Nancy Morales Cruz, quien tomó las admisiones de Rodríguez Flores y Miranda López.

Según la información que las autoridades ofrecieron al momento del arresto de la pareja, la imputada supuestamente admitió que en diciembre pasado, su bebé no paraba de llorar, así que le dio leche y lo colocó boca arriba. Esta acción provocó que el pequeño Carlos Humberto Santiago Rodríguez se ahogara con su propio vómito.

Su compañero lo encontró y ambos decidieron guardarlo en el congelador de la nevera, porque no podían acudir a las autoridades ya que el hombre se encontraba prófugo por un caso de narcotráfico en el foro federal, de acuerdo a las autoridades.

Desde el momento de su detención, Rodríguez Flores se encuentra recibiendo tratamiento en el Hospital de Siquiatría Correccional en Río Piedras. Miranda López se encuentra detenido en el Centro de Detenciones federal en Guaynabo.

Hoy, en la sala 605, ninguno cruzó miradas. Como en la cita anterior, se sentaron separados, cada uno al lado de sus abogados sin dirigirse palabra.

A su salida del salón de sesiones, ni la defensa, ni el ministerio público descartaron la posibilidad de un acuerdo. Sin embargo, las partes insistieron en que al momento no existe un preacuerdo que lleve a los ahora acusados a realizar una alegación de culpabilidad.

“No ha habido ninguna conversación, pero el ministerio público no cierra las puertas a que en el futuro haya un acuerdo”, afirmó la fiscal Benzaquen Parkes.

“Fue una renuncia libre, voluntaria e inesperada”, añadió la fiscal Gabriel Maisonet, quien se encuentra de turno esta semana.

El licenciado Roselló Rivera, por su parte, indicó que la movida lo coloca en una mejor posición para preparar la defensa de su cliente.

“Entendemos que en esta etapa es lo más favorable para nuestro cliente. (La renuncia a la vista preliminar) conlleva a que se nos entregue el descubrimiento de prueba y que estemos en una mejor posición para evaluar las defensas que se presentarían”, apuntó.

El descubrimiento de prueba o la Regla 95 es el proceso mediante el cual el ministerio público entrega a la defensa la evidencia del caso. En esta etapa el ministerio público también debe entregar, si existe, la prueba exculpatoria a favor del acusado.

 Rosselló Rivera y la licenciada Benítez Santiago se mostraron abiertos a alcanzar un acuerdo con el ministerio público.

“Eso es una puerta que nosotros no cerramos nunca”, afirmó el abogado.

La licenciada Benítez Santiago también coincidió en que la renuncia a la vista preliminar constituye una movida estratégica.

“La razón por la que se renunció a la vista preliminar es porque nos pone en mejor posición de conocer cuál es la prueba que hay en el caso porque mientras se está viendo la vista preliminar uno se va enterando de la prueba, según desfila, pero ya a nivel de juicio teniendo todo el descubrimiento de prueba ya no hay sorpresas y uno está en mejor posición para prepararse, para traer prueba de defensa e interrogar testigos”, señaló antes de abandonar el centro judicial en compañía de sus colegas Pérez Quiles y Torres Medina.