Flojos, mal instalados y algunos hasta inservibles. Así se resumen los principales hallazgos de una inspección realizada este domingo por la Administración de Compensaciones por Accidentes de Automóviles (ACAA) y el Cuerpo de Bomberos de Carolina a los asientos protectores de quienes asistieron a una feria de seguridad en el Museo del Niño, en ese municipio.

Cerca de 50 vehículos de motor fueron examinados durante la actividad de orientación sobre la colocación correcta de los asientos protectores. El evento se celebró como parte del “Mes de Orientación sobre la Seguridad del Niño Pasajero”.

Las estadísticas que maneja la ACAA sobre el tema apuntan a que cerca del 60% de los asientos protectores están mal instalados, pero la experiencia de este domingo en Carolina reveló que la situación podría ser peor.

“El 90% (en la actividad) estaban mal colocados. Hubo casos que estaban literalmente sueltos”, dijo Germán Santiago, director del Cuerpo de Bomberos de Carolina.

Según los funcionarios de la ACAA y del Cuerpo de Bomberos municipal, la ciudadanía debe estar pendiente a la fecha de expiración de los asientos protectores, pues estos aditamentos suelen tener una vida útil de seis años, y deben velar también la posición en que están colocados.

“En un carro, el asiento no pasó la inspección, y se le pidió que pasara por un parque de bombas a buscar un asiento prestado”, dijo Jethzabelle Ramos, oficial de educación de la ACAA.

“La mayoría de los casos eran niños que los asientos protectores estaban sueltos... Aunque lo trabajamos todo el año, hay mucha necesidad de educar a los papás”, indicó, por su parte, Irmaliz Rodríguez, directora de relaciones públicas de la ACAA.

Los funcionarios advirtieron, además, que una nueva ley dispone que todo menor, entre los cinco y nueve años de edad, debe utilizar un asiento elevado (“booster seat”) cuando viaja en carro. Previamente, estos niños no necesitaban ese equipo.

La ley también contempla que, si tienes tres multas por no usar asientos protectores, con un monto de $100 cada una, los progenitores serían referidos al Departamento de Familia, se indicó.

Para el evento, se estableció un área de cotejo rápido frente al Museo del Niño, ubicado en la Avenida Campo Rico, en Carolina. Los visitantes entraban con su vehículo, el personal del Cuerpo de Bomberos verificaba la instalación de los asientos protectores, y luego los ciudadanos continuaban su marcha.

Además de los cerca de 50 asientos examinados, las personas que visitaron el museo este domingo recibieron folletos informativos sobre el uso correcto de esos aditamentos.

Las personas interesadas en inspeccionar sus asientos pueden acudir a alguna de las 60 estaciones de bomberos alrededor del País, donde técnicos certificados en asientos protectores podrán cotejar si el equipo es utilizado efectivamente.