Pedro Luis Báez Torres, acusado por producir pornografía infantil de una estudiante de 14 años en la escuela en donde trabajaba como guardia de seguridad, fue sentenciado a cumplir 15 años de prisión y 10 años de libertad supervisada.

El hoy convicto, de 26 años, fue sentenciado por la jueza federal Carmen C. Cerezo, quien acogió la pena recomendada en el acuerdo al que llegaron las partes, representados por el abogado Rubén Morales, de la Oficina del Defensor Público federal, y la fiscal Elba Gorbea.

Familiares de la víctima estuvieron presentes en sala, pero no quisieron emitir declaraciones durante la lectura de sentencia.

Báez Torres hizo alegación de culpabilidad el 26 de febrero pasado por contactar a una estudiante de la escuela en la que trabajaba en Cayey. Según la pesquisa, a través de un compañero de clases, el hoy convicto consiguió el contacto de la menor por una aplicación del teléfono celular.

Una vez comenzaron a hablar, el hombre, residente de Cidra y padre de tres hijos, fue cada vez más exigente con ella, solicitándole fotos desnuda. Cuando agentes federales lo detuvieron el 4 de septiembre de 2013, encontraron en su teléfono celular 122 imágenes de la adolescente, en su mayoría sexualmente explícitas.