Contrario a la teoría de la fiscalía de que un bebé murió por desnutrición, la defensa de Luzdianne González Nieves trajo a colación información en la vista preliminar que refuta aparentemente la acusación y demuestra que Edgardo Edriel González pesaba 26 libras, y no 15 libras al momento de fallecer el 20 de noviembre de 2011.

González Nieves está acusada de dejar morir a su hijo por mal nutrición y maltratar a sus otros hijos. La defensa trajo el historial médico de la sala de emergencias del Hospital Pavía, que consigna que Edgardo Edriel pesaba 26 libras a las 9:10 a.m. del 20 de noviembre de 2011.

Hasta el momento, las fiscales Germaine Báez Fernández y Vanessa Méndez Torres, de la Unidad Especializada de Violencia Doméstica, Delitos Sexuales y Maltrato a Menores, habían presentado evidencia de que el pequeño de 4 años, pesaba unas 15 libras al momento de su muerte.

En la sala del juez Enrique Silva Aviles, del centro judicial de San Juan, compareció el médico residente Carlos Javier Ocasio López, uno de los tres galenos que atendió al pequeño cuando fue llevado al Hospital Pediátrico en el Centro Médico en Río Piedras, la tarde del 20 de noviembre, cuando el menor tenía un tubo que le suministraba oxígeno fuera de lugar.

Esta acción, según Ocasio López, pudo haber afectado la capacidad respiratoria del menor.

La mamá del niño acudió con su hijo enfermo con vómitos al Hospital Pavía, de Hato Rey, donde el menor recibió atención médica antes de ser trasladado al Hospital Pediátrico.

Ocasio López, quien es un residente de sexto año del programa de intensivo pediátrico, declaró que el niño llegó a la institución entre 3:00 y 3:30 p.m. “entubado, con deshidratación severa y signos evidentes de 'shock'”. El menor también presentaba “pobre acceso venoso, fallo respiratorio y vitales inestables”.

En una declaración que se extendió varias horas, el médico residente indicó que al menor se le realizaron sobre 30 pinchazos para lograr un acceso a una vena.

Explicó, a preguntas de la fiscal Báez Fernández, que la pobre masa muscular del niño evidenciaba malnutrición y que las placas de pecho realizadas al menor demostraban cambios crónicos y un poco de pulmonía.

En torno al peso, señaló que las escalas para un niño normal establecen que un niño de 4 años debería pesar unas 35 libras y que para llegar al cuadro que presentaba Edgardo Edriel, él debió haber padecido malnutrición “por más de un mes y posiblemente mucho más tiempo”.

Recibió sangre

Afirmó también que el menor recibió una transfusión de sangre “por todo el cuadro médico” y que durante el tiempo que estuvo en la unidad de cuidado intensivo sufrió tres paros respiratorios. El último ocurrió como a las 6:35 a.m. del lunes 21 de noviembre. El menor murió una hora después.

Con la ayuda del pediatra y perito Lidy López, el abogado Rossi cuestionó las conclusiones del médico residente, quien reconoció que desconocía la complejidad del cuadro de salud del menor cuando lo atendió inicialmente en el Hospital Pediátrico.

 Ocasio López explicó que la cama donde se ubicó al niño funciona como una balanza que tomó el peso del menor cuando llegó al Pediátrico. Esa balanza fijó el peso del niño en unas 15 libras, pero el médico aceptó que desconocía sobre el historial de sala de emergencias y la hoja de medicamentos que consignaban un peso de 26 libras unas horas antes.

Tenía el tubo fuera de lugar

Detalló que cuando el menor llegó al Pediátrico, los médicos se percataron que el tubo de oxígeno estaba en el esófago y no en la tráquea. Pese a que no quiso afirmar que la entubación en Pavía se realizó de forma incorrecta porque el tubo se pudo desplazar durante el viaje entre los hospitales, aceptó que esa situación perjudicó la capacidad respiratoria del menor.

Ocasio López fue quien entubó al menor en el Pediátrico.

Afirmó que “sabíamos que era pretérmino” y que “en algún momento” supo que el menor tenía una condición neurológica de retraso severo.

También reconoció que de las placas tomadas al menor se desprende que tenía neumatosis intestinal, una condición de inflación de los intestinos cuando les entra aire. Esta condición puede causar vómitos y diarreas, así como pérdida de peso, según dijo el médico.

Además, admitió que un niño que no se mueve y que padece atrofia muscular, como el caso del menor muerto, tendría una baja masa muscular y contestó que desconocía las fluctuaciones de peso del niño a lo largo de su vida.

Ocasio López, a preguntas del abogado, señaló que el vómito puede provocar una aspiración, una acción que permite que el vómito entre a la tráquea y eventualmente a los pulmones causando pulmonía.

En las últimas preguntas del abogado, el galeno, quien lució incómodo durante las preguntas del ministerio público y la defensa, indicó que no existe una medida específica para calcular el peso de un niño con una condición neurológica severa y que la malnutrición puede responder a un problema de absorción de alimentos.

Nuevo perito

Los abogados de la defensa sumaron al equipo de la defensa a López, un conocido pediatra quien los asesoró durante los trabajos del día y quien eventualmente se sentará como testigo de la defensa.

 Con una larga trayectoria de trabajo, López ayudó a lograr la exoneración hace varios años de William Elías y Bernadeth Virkler, acusados de homicidio negligente por la muerte de su hijo recién nacido.

 La vista sigue el 29 de abril a las 10:00 a.m.