El robo de identidad es un delito que mantiene a las autoridades en jaque. 

“Están entrando a sistemas de diferentes comercios en Puerto Rico y Estados Unidos donde se hacen compras con tarjetas crédito o débito y cuando pasan por la caja la tarjeta, ya hay un hacker que entró al sistema del terminal robando la identidad completa y la vende a los Estados Unidos o en otras partes del mundo”, detalló Ayala. 

De acuerdo al patrón observado, por medio de las querellas que se han presentado en Puerto Rico bajo este esquema y las transacciones ilícitas, estos delincuentes podrían estar radicados en California y en Florida.

“Hay un alza considerable de casos. Son transacciones fuera en Puerto Rico, la roban (su identidad) en Condado o Isla Verde, pero esa información se usa en California, Florida, Nueva York o en Londres. Ahí nos cortan las alas, porque se pierde el rastro”, reveló Ayala.

La información la suelen vender en la misma red, por Internet, ya que tienen clientes en su organización criminal en diferentes países, incluso China, aseveró Ayala, quien recomienda a los consumidores realizar sus transacciones con dinero en efectivo como primera opción.

 El robo de información de las tarjetas de débito o crédito (“skimming”) es otra de las modalidades que ocurre con más frecuencia. Se trata de una máquina que capta la lectura de los datos  cuando se pasa la tarjeta para hacer un retiro de dinero o un pago.

También existe otra que cabe en la mano del empleado, quien cuando le toma la tarjeta de crédito para facturarle la pasa inadvertidamente por el dispositivo.