Un hombre que fue acusado en ausencia por violencia doméstica y cuya pequeña hija fue declarada muerta el viernes tras ser hallada inconsciente en el hogar donde el matrimonio sostuvo un altercado la semana pasada, se entregó hoy, lunes, a las autoridades, confirmó esta tarde el teniente Luis Díaz, adscrito a la División de Arrestos y Extradiciones de la Policía.

Scottie O. Vargas Molina, de 21 años, fue acusado por el delito de maltrato conyugal, bajo la Ley 54 de Violencia Doméstica, y se le señaló una fianza de $100,000, el pasado viernes. 

Desde entonces se encontraba prófugo de la justicia.

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Ya el hombre había sido acusado en agosto por otro caso de violencia de género.

No se ha establecido claramente qué provocó que la menor quedara inconsciente justo en medio de un incidente de violencia de género que involucró a sus progenitores. El asunto está bajo investigación de las autoridades.

El acto ocurrió en una residencia del camino Avelino López, del sector Los Martínez II, en Caimito, en horas de la noche del miércoles, cuando, según la madre de la niña de un año y medio, sostuvo una discusión con su pareja motivada por un vehículo de motor, y el hombre la agredió en el rostro con las manos. Acto seguido, el padre de la menor se encerró en el cuarto con la niña y cuando la progenitora, de 28 Años, logró entrar, la encontró inconsciente acostada sobre la cuna.

Los padres de la menor la transportaron al hospital Pavía, en Cupey, en un vehículo de un primo de la mujer. Poco después no se supo más del paradero de Vargas Molina hasta hoy. La menor moriría posteriormente en el Hospital Pediátrico en Centro Médico, a donde fue trasladada.

Esta tarde Cynthia Santiago, portavoz del Instituto de Ciencias Forenses, indicó que esta agencia espera por la entrega del cuerpo de la menor. Mientras, se completa con el proceso en manos de la empresa Life Link para extracción de órganos a ser donados. A preguntas, Santiago dijo que Life Link tiene que rendir un informe sobre sus hallazgos y si se encuentra que un órgano presenta algún tipo de daño, no se remueve.