Con el cierre de las Oficinas de Prensa de Bayamón y Carolina, el superintendente, José L. Caldero López, inició hoy una reestructuración de la plantilla de policías que realizan labores de personal civil y el proyectado traslado de más de 80 oficiales, adscritos a la Oficina de Seguridad y Protección, los cuales serán asignados a la Superintendencia Auxiliar de Operaciones de Campo (SAOC).

 Las instrucciones del cierre inmediato de las dos dependencias de prensa, para centralizarlas en la oficina que opera desde el Cuartel General, fueron impartidas durante la tarde de ayer, viernes, durante la reunión rutinaria de staff de Caldero con los jefes de las áreas de Bayamón, el coronel Reinaldo Bermúdez, y de Carolina, coronel Gregorio Merced.

Sin embargo, a pesar de que los cambios y traslados serán efectivos este lunes, los oficiales de prensa aún no habían sido notificados del cambio al día de hoy.

Caldero aclaró que, a partir de hoy, sábado, las oficinas de Centro de Mando y Control tendrán que responder directamente a la oficina central de comunicaciones para difundir las incidencias diarias.

 “Estamos realizando esta reestructuración sin que se afecte la información y el derecho que tiene el pueblo a estar informado a través de la prensa”, aseveró el superintendente en entrevista con este medio.

 En las 13 oficinas de prensa, que operan en las diferentes áreas policiacas de la Isla, hay 35 policías y varios sargentos asignados.

 “Las demás oficinas, hasta ahora seguirán operando normal, pero estamos analizando las cantidades de policías y cómo han sido distribuidos. Hay varias oficinas en la isla, en las que hay un sargento supervisando a policías. Yo necesito sargentos supervisando en los cuarteles. Hay lugares en los que tengo 17 agentes siendo supervisados por solo un sargento”, argumentó Caldero.

Sobre la necesidad de asignar sargentos a las posiciones de supervisión, admitió que en la actualidad hay 1,500 plazas de ese rango disponibles, pero requieren de una asignación presupuestaria para poder llenar las vacantes utilizando las listas de los policías que pasaron los exámenes de rigor.

 Según el superintendente, de acuerdo al censo que se efectuó recientemente, además hay unos 1,218 agentes realizando labores de oficinistas, los que considera son necesarios para realizar labores de seguridad en las calles de Puerto Rico. Esta cifra no incluye a los 440 agentes desarmados que están reasignados a otras labores por diferentes causas.

 “La desproporción es grande, necesitamos a ese personal en las calles cerca de la ciudadanía cuidando su seguridad”, insistió Caldero.

 Adelantó, que a partir de la semana próxima, comenzarán a trasladar a 84 agentes de la Oficina de Seguridad y Protección, la cual está a cargo de las escoltas y de la seguridad de dignatarios, a quienes se les reasignarán funciones.

 Caldero justificó su decisión utilizando el ejemplo del cuartel del municipio de Florida, en el que laboran solo 16 agentes y un sargento, mientras que en las oficinas de Seguridad y Protección de las áreas de Arecibo y Aguadilla laboran 31 policías.

 Al preguntarle si estos cambios fueron consultados y cuentan con el aval del asesor técnico de cumplimiento de la Reforma de la Policía, Arnaldo Claudio, el superintendente aclaró que el lunes los abogados de la Policía tiene pautada una reunión con él para estos fines.

 Ayer, el juez federal Gustavo A. Gelpí, ordenó a Caldero que debe informar cualquier nombramiento, designación, promoción o cambio de personal al monitor federal de la Reforma de la Policía y a los departamentos de Justicia estatal y federal con anticipación.

“No tengo problemas con informar, pero el acuerdo dice que el superintendente tendrá libertad para dirigir la Policía y el monitor tendrá que velar por el cumplimiento con los acuerdos negociados y darle seguimiento a los adelantos de la Reforma de la Policía”, respondió Caldero, al preguntarle si le había consultado estos cambios a Claudio.

Agregó, que continúa en proceso de análisis sobre cuáles serían las próximas oficinas que serán reestructuradas.

Al momento, la cantidad total de policías estatales es de 14,538.