El juez presidente del Tribunal Supremo, Federico Hernández Denton, calificó ayer de “inaceptable” la forma en que se manejó el caso del asesinato del joven Juan Carlos Ruiz Vega, que requirió que las autoridades federales intervinieran y arrestaran el martes a cuatro de los nueve acusados por el crimen en pleno Tribunal de Primera Instancia de Ponce.

De inmediato, ordenó una investigación exhaustiva.

Los sujetos, acusados por el asesinato de Ruiz Vega, el 30 de noviembre de 2012, en la calle Méndez Vigo de Ponce, iban a ser excarcelados el martes por haberse cumplido el término constitucional de juicio rápido (hábeas corpus).

La pesquisa, explicó Hernández Denton, tiene el fin de adjudicar responsabilidades y “tomar las acciones que sean necesarias para evitar que situaciones como esta se repitan”.

En declaraciones escritas, Hernández Denton expresó que este tipo de acción de parte de miembros de la judicatura es “inaceptable”.

El juez dijo que “siempre he requerido que, sin menoscabar los derechos de los imputados, los procesos se manejen teniendo en cuenta el vencimiento de los términos. Incluso, hemos trabajado en el diseño de sistemas que permiten a los jueces y las juezas atender sus salas con alertas de vencimiento de términos”, sostuvo.

Hernández Denton también mencionó que ha sido “enfático en requerirles (a los jueces y juezas) mantener pleno control de sus salas, sin permitir que sean los demás participantes del escenario judicial quienes controlen el devenir de los procesos”.

El martes, agentes de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas arrestaron en la sala del juez Francisco Quiñones al cuarteto, que enfrenta más de 400 cargos en su contra, luego de que un Gran Jurado emitió una acusación por los delitos de posesión con intención de distribuir sustancias controladas en el área de Méndez Vigo, en Ponce, y conspirar para distribuir crack, marihuana y heroína.