Un testigo declaró haber visto a un "muchacho trigueño" apuntar con un arma de fuego y amenazar a los participantes en una fiesta en la urbanización Hacienda Sabanera en Cidra, la madrugada del 29 de junio de 2012, mientras Jan Carlos "Yankee" Alvarado Martínez yacía en el suelo con una herida de bala en el pecho.

Ese muchacho trigueño había llegado a la fiesta junto a un amigo de tez blanca, señaló el testigo durante el juicio por jurado que se ventila en el tribunal de Caguas, contra Jean Carlos López Carrasquillo por asesinato en primer grado y cinco violaciones a la Ley de armas.

Aunque la mayoría de los jóvenes que se encontraban en la fiesta eran "del barrio", a esos dos chicos el testigo no los conocía. El declarante, quien durante la fiesta compartió con Yankee la tarea de poner la música, dijo que en un momento dado ambos se le acercaron para pedirle que pusiera reguetón.

A preguntas del fiscal Angel García Rodríguez, el testigo relató hoy que pasadas las 12:30 a.m. de aquel día se encontraba instalando unas luces en el equipo de sonido, ubicado en la terraza de la residencia, cuando "escuchó un tipo de explosión dentro de la casa".

"Yo corro y entro a la casa por el 'family'. Veo al muchacho trigueño de camisa azul con una pistola y diciendo 'pa’que sigas jodiendo'", indicó el testigo de la fiscalía.

Durante el juicio ha desfilado prueba que coloca a López Carrasquillo vestido con una camisa azul esa noche y en compañía de su amigo Heriberto Martínez León, quien en un caso aparte se declaró culpable de encubrimiento por estos hechos y cumplió una sentencia de seis meses en prisión.

Según el testigo, el joven de la camisa azul estaba parado entre la barra y la mesa del comedor, como a 7 pies de distancia suya, y el lugar ya estaba iluminado, pues prendieron las luces luego de escucharse la "explosión". En el suelo de esa misma área se encontraba Yankee con una herida de bala en el lado izquierdo del pecho.

"Me apunta a mí y a varias personas más y dice que se vayan de la casa", dijo el testigo, quien citó verbalmente la aseveración del varón con el arma de fuego antes de huir junto a su acompañante. "Yo estaba en "shock'", agregó.

El testigo fue quien llamó al Servicio de Emergencias 9-1-1 y aseguró que no se despegó de Yankee hasta que varios participantes de la fiesta lo montaron en un vehículo Acura para llevarlo al hospital.

La próxima vez que vio a su amigo fue sobre el pavimento de la carretera de la urbanización, donde lo colocaron luego de que el conductor del Acura se accidentara.

En sala se difundió la grabación de las llamadas que generó el testigo al 9-1-1. En la primera llamada se le escucha a él desesperado, hablando simultáneamente con el operador y con gente de la fiesta, informando sobre una emergencia y tratando de precisar la dirección de la casa. En otra llamada reclama "por favor, avancen, por favor", pues la ambulancia no llegaba, y le decía al operador que iban a mover a Yankee a un carro para sacarlo de la urbanización. Como el operador le pedía que esperaran, se oye gritar al testigo "no lo montes, que viene la ambulancia".

 Otro intercambio que se escuchó fue el del operador del 9-1-1 con un agente de la Policía al que le dio la querella de un herido de bala. Por último, se pasó la tercera llamada que hizo el testigo para verificar el estatus de la ambulancia, donde el operador le dice "tengo la guagua ‘aguantá’ porque hay detonaciones" y que no entraría hasta que llegara la Policía.

El testigo expresó que primero llegó la Policía y enseguida la ambulancia, y los paramédicos declararon muerto a Yankee. Entonces los agentes iniciaron la investigación y personal del Instituto de Ciencias Forenses levantó el cadáver.

Relató que esa madrugada le declaró "por encima" lo que había pasado al agente Jesús Torres Ramírez, que fue a las 7:00 a.m. al cuartel para dar su información básica y que lo citaron para el 30 de junio, a tomarle declaración.

El 5 de julio, compareció a una rueda de confrontación, en la que eligió al hombre #4 (de cinco) "porque ese fue el que identifiqué que estaba en la fiesta con el arma en la mano".

Al jurado se le mostró la foto de la rueda de confrontación y el documento preparado por el agente Torres estableciendo que López Carrasquillo fue la persona identificada.

El juicio continuará el próximo 19 de septiembre a las 2:00 p.m. en la sala 506 presidida por el juez Roberto Angleró Ortiz.