Todos los residenciales públicos de Puerto Rico cuentan con, al menos, un punto de venta de droga, según reveló hoy la jefa de la Fiscalía federal en la isla caribeña, Rosa Emilia Rodríguez.

La funcionaria aprovechó un encuentro con la prensa en el que se hizo balance de la actividad de su agencia durante 2016 para denunciar que los residenciales públicos sirven como centro de distribución de droga a todo el territorio de Puerto Rico.

Rodríguez indicó que el hecho de que los puntos de venta de droga se sitúen en el interior de los residenciales públicos dificultad la tarea de las fuerzas del orden en la lucha contra el narcotráfico.

La funcionaria dio a conocer además que el 80 % de la droga que llega de Sudamérica a Puerto Rico se reenvía a Estados Unidos, dado que en el país norteamericano se vende a un precio muy superior al que se comercializa en las calles de la isla caribeña.

Rodríguez señaló que el kilogramo de cocaína se vende en el mercado negro a unos 20,000 dólares más en Estados Unidos que en territorio de Puerto Rico.

La funcionaria federal dijo que Puerto Rico sirve desde hace años a las mafias del narcotráfico de Sudamérica como punto para introducir droga en Estados Unidos, ya que una vez dentro del Estado Libre Asociado -territorio estadounidense- es relativamente sencillo pasar la droga al continente gracias a que los controles de seguridad se reducen considerablemente.

La jefa de la Fiscalía federal subrayó además que Puerto Rico es un eje clave para la introducción de droga en Estados Unidos dada su mayor cercanía a los países productores de Sudamérica.

Las disputas por el control de los puntos de venta de droga son la principal causa del alto número de asesinatos que se registran en las calles de la isla, con especial incidencia en la capital y su área metropolitana.