¿Mujeres en la fuerza de choque?

Pues sepa que sí. Aunque vamos a estar claros: siempre las ha habido, pero ahora por primera vez en la historia de la Uniformada habrá una escuadra compuesta únicamente por féminas en la División de Operaciones Tácticas (DOT).

Esta división es la que trabaja en situaciones de tensión, como motines, disturbios y rescates, entre otras encomiendas.

Para algunos puede sonar como una contradicción que haya un grupo de mujeres en esta división, que durante tantos años se caracterizó por repartir palos a diestra y siniestra en enfrentamientos con civiles.

Pero lo cierto es que la Policía de Puerto Rico está en medio de una transformación, supervisada por un monitor federal y en  búsqueda de tener una organización equilibrada. 

Es por eso que el superintendente José Caldero hizo la convocatoria a la que respondieron 24 féminas de todas las regiones del País, explicó el comandante Mario González.

De esas, quedarían unas 10 o 12 en la escuadra. La selección se hará dentro de unas dos semanas, añadió.

Primera Hora visitó el cuartel donde se realizan los duros entrenamientos del grupo y habló con las agentes.

Las hay con hijos, sin hijos, casadas, solteras con pareja, con familiares en la Uniformada o las primeras de su clan en unirse a la fuerza... de todo.

Preparadas  para las críticas

Estas mujeres están claras de que habrá quien las critique,  las malinterprete y hasta quien piense que con ellas tendrán consideraciones que no se tienen con los varones.

Nada de eso les hará desistir en su empeño, aseguraron.

Al verlas es obvio que destilan orgullo, ganas de superarse, de demostrar que pueden ir por encima de las expectativas físicas y mentales del entrenamiento en el que están inmersas y que están enfocadas en lograr destacarse en un futuro no muy lejano.

Aquí no hay envidias, ni chismes, ni peleas, coinciden por separado.

“Te voy a decir la verdad, dicen que las mujeres juntas no pueden bregar, que nos tiramos unas a las otras... aquí no es as”, aseguró  Angélica Ortiz una de las más veteranas en el cuerpo.

Un sacrificio que vale  la pena

El examen físico que deben pasar las 24 mujeres en entrenamiento táctico incluye ejercicios como push-ups, abdominales, pull-ups y carreras con y sin obstáculos en un corto periodo de tiempo.

Tienen que pasar además unas pruebas sicológicas especiales para agentes tácticos y unos exámenes sobre conocimiento en derechos civiles.

Todo ello conlleva un gran sacrificio y preparación, coinciden. 

Al mismo tiempo significa un reto grande a vencer, dijo Angélica, de 36 años, natural de Barranquitas y madre soltera de  una niña de ocho años.

 Angélica es una de las que más tiempo lleva en la Policía, y ha visto el cambio en la mentalidad dentro de la organización hacia la presencia de mujeres en operaciones tácticas. 

 “Antes era posible que hubiese algunas situaciones. Hoy en día si hay hostigamiento (sexual) o cualquier otra circunstancia o que te falten el respeto se ejerce disciplina”, destacó.

Con la frente en alto asegura que en su caso lo que busca es hacer que su niña esté tan contenta con la difícil tarea que realiza y que pueda ser su ejemplo, igual que su padre lo fue para ella.

“Aquí se trabaja todos los días bien fuerte para tener una condición óptima física y mentalmente. Es un sacrificio continuo, es duro, sí. Pero cuando estoy aquí lo que pienso es que con esto que yo hago puedo darle el mejor bienestar a mi hija. A ella le encanta verme en uniforme y con esto yo quiero enseñarle que todo se puede”, relató durante una visita de Primera Hora al destacamento en Hato Rey.

Para Lizaida Carrero de 31 años y natural de Rincón, y quien estuvo dos años en la unidad de ciclistas de Bayamón oeste, una de las cosas que más le llama la atención es que la división se convierte en la “imagen de la Policía en cada acto protocolar”, aparte de las destrezas que se desarrollan en términos de estrategias.

Suanette Figueroa Hernández, de 33 años y natural de Trujillo Alto, destacó la disciplina y el compromiso de todas las mujeres del grupo como la recompensa al  gran sacrificio de no ver todo el tiempo a sus hijos de nueve y cuatro años.

 “Una vez se pasa el entrenamiento físico y entiendes los aspectos de esta división ya se convierten en parte de tu familia. Estás con gente que está dando el 100% igual que tú, que sabes que van a estar contigo apoyándote pase lo que pase. Eso es valioso... también creo que estamos rompiendo estereotipos que las personas tienen. Nosotras estamos aquí laborando con el corazón y buscando servir siempre”, indicó.

Cambio de paradigma

Todavía queda vivo en el recuerdo colectivo las imágenes de agentes varones  arrestando estudiantes mujeres en una huelga en la Universidad de Puerto Rico, algunos, con sus manos en partes indebidas.

Esas actitudes deben quedar en el pasado, dijo Angélica.

Y es que con la reforma de la Policía que da paso a la creación de esta escuadra, también se busca garantizar que se respeten los derechos humanos, según el comandante González.

“La idea de esa escuadra es tenerlas preparadas para cualquier eventualidad cualquier cosa que surja en Puerto Rico  para ellas operar en cualquier manifestación. Para ellas es un reto porque entienden que la División de Operaciones Tácticas se hizo para hombres y ellas quieren estar a la par y físicamente se tienen que entrenar y lucir bien en los entrenamientos”, afirmó el alto oficial .

“Es que hay que tener más sensibilidad en la calle, más compasión. Si vas a estar en situaciones tienes que analizar primero, dialogar”, continuó por su parte Angélica.

¿No se trata de que las van a llamar solo para que luzcan?

¡Pero por supuesto que no! Nosotras tenemos las mismas capacidades y el manejo del control de emociones, igual que los compañeros. Nos vamos a asegurar de que estamos consideradas iguales. Y lo estamos demostrando, declaró la sargento a cargo de la escuedra Yarimar Fernández.