Natasha tenía grandes sueños y se encaminaba para alcanzarlos... uno de estos era llegar a Hollywood. La pasión de Héctor era el baloncesto y hasta fue firmado por los Piratas de Quebradillas del baloncesto superior este año. Mientras, Oscar estudiaba en el RUM educación física adaptada, dirigida a niños con limitaciones físicas o cognoscitivas.

Tres vidas jóvenes llenas de sueños, tres vidas perdidas a destiempo. Sueños que no se verán cumplidos.

Los familiares de Natasha Maisonet Vélez, de 19 años; Héctor Rojas Dávila, de 20, y de Oscar Ramos Pérez, de 22, aún no hayan consuelo ante la trágica muerte del trío de universitarios, cuyas aspiraciones fueron tronchadas el pasado sábado, luego que un aparente error humano cobrara la vida de estos en un motel en Juana Díaz.

Tras haber salido de disfrutar de un día en las Justas de la Liga Atlética Interuniversitaria (LAI), que se celebraban en Ponce, los jóvenes llegaron hasta el motel Adonis, donde se alojaron tarde en la noche. Ramos Pérez, quien era el conductor del Hyundai Accent en el que viajaban, decidió quedarse a dormir dentro del vehículo, mientras que Maisonet Vélez y Rojas Dávila ocuparon la habitación. Tras haber dejado el auto encendido, las emisiones de monóxido de carbono se apoderaron del lugar, intoxicando y matando a los tres.

Ayer, los familiares de estos estudiantes no podían ocultar el dolor y el sufrimiento que les ha causado la muerte súbita de estos jóvenes que apenas comenzaban a vivir.

En la casa de Jacqueline Vélez, madre de Natasha, el ambiente era lúgubre. Vélez permanecía en el cuarto de su niña, rodeada por familiares, quienes se encontraban sumamente afectados por este lamentable incidente.

“Ella era mi nena bella... Una chica muy alegre, bromista, que se caracterizaba por hacer sonreír a los demás o sacarle una carcajada”, alcanzó a decir la madre, quien conversó brevemente con Primera Hora, mientras que era consolada por algunas de sus primas.

En el cuarto guardaba una fotografía de Natasha cuando participó en el certamen de belleza Miss Teen, representando al pueblo de Quebradillas. Recientemente, Natasha también representó al pueblo de Camuy en la edición Miss Teen World 2013.

Y es que la joven era toda una soñadora y apasionada, con una meta trazada de algún día poder llegar a la meca del cine, según compartió su tía, Carmen Rodríguez.

“Natasha era un ser humano soñador, con buenos sentimientos, con muchísimas aspiraciones. No es fácil aceptarlo porque era una joven con muchas ganas de vivir, llena de luz y alegría”, manifestó Rodríguez, quien reveló que, entre los muchos planes que tenía su sobrina, se encontraban los de poder hacer una maestría en Publicidad y Relaciones Públicas en alguna universidad de California, a pesar de que también sentía grandes pasiones por el periodismo y la actuación. Natasha cursaba su primer año en comunicaciones en la Universidad del Sagrado Corazón.

Su amigo, Héctor Rojas Dávila, murió en la misma habitación que ella, acabando al mismo tiempo una amistad que los unía desde la escuela superior. En la casa de Héctor, en el barrio San Antonio, en Camuy, las paredes no podían suprimir el llanto y los gritos de angustia que se les escapaban a sus familiares.

Odimaris Rojas, hermana de la víctima, describió a Héctor como un chico introvertido, “aunque en la cancha era otra persona, bien dinámica y explosiva”. Por otro lado, Rosa Nieves, prima segunda del fenecido, destacó que, con sus buenas acciones, Héctor era visto como un líder y el ejemplo a seguir para decenas de niños en la comunidad.

“Su pasión era el baloncesto, lo llevaba en la sangre. Él ayudaba a otros niños que se interesaban por el deporte. Él les daba clases y compartía con ellos... se vivía el baloncesto”, detalló.

Desde chico, Héctor participó de las ligas infantiles y fue seleccionado como mejor anotador en la escuela superior Manuel Ramos Hernández, en Quebradillas. Este año, su sueño de pertenecer a un equipo profesional se le dio cuando los Piratas de Quebradillas lo firmaron.

“Es una verdadera lástima perder a un joven prospecto como él, que era tremendo ser humano”, lamentó el gerente general de los Piratas, Gabriel Miranda.

“Lo teníamos visto porque en un futuro no muy lejano se podía establecer como una figura destacada en la liga. Era bien disciplinado en su trabajo y en las prácticas”, dijo.

La misma pasión que sentía Héctor por el baloncesto y los deportes la compartía su otro amigo de la niñez, Oscar, quien no rebotó la bola hacia una liga de baloncesto, sino que prefirió educarse para servir de maestro a niños con discapacidades.

El estudiante de educación física adaptada del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), quien este semestre tomaba cursos con permiso especial en la Universidad de Puerto Rico en Arecibo (UPRA), vivía separado por una sola calle de su amigo de toda la vida, Héctor.

El tío de Oscar, Iván Ramos, se refirió al muchacho como un joven “brillante, bueno y luchador”.

“La muerte de Oscar nos ha dado fuerte porque era un muchacho lleno de vida”, expresó el hombre luego de revelar que los padres del estudiante tuvieron que ser sedados tras la devastadora noticia.

En horas de la tarde, la madre de Oscar llegó al Instituto de Ciencias Forenses (ICF), seguida por el padre de Héctor, que se llama igual que el menor de sus tres hijos. Cuando ambos finalizaron los trámites y se reencontraron en la sala de espera, se fundieron en un abrazo y no pudieron contener las lágrimas, mientras que los familiares que los acompañaron trataban de consolarlos.

“Eran excelentes muchachos… eran dos muchachos humildes, trabajadores y estamos aquí resignados… esto es devastador”, declaró el padre. “(Ojalá) de alguna manera u otra, esto sirva de ejemplo para otros jóvenes que tomen cautela cuando vayan a participar de actividades”.

“A la muchacha y a Oscar en el corazón los vamos a llevar porque fue un caso lamentable… a las familias que tengan fortaleza como nosotros hasta ahora, que continúen con la lucha que nosotros los vamos a apoyar”, dijo Kevin Rojas, hermano mayor de Héctor.

Se espera que el cuerpo de Rojas Dávila sea expuesto en horas de la tarde de hoy en la Funeraria Avilés, en Quebradillas, mientras que Ramos Pérez será velado en su residencia, posiblemente mañana.

Los restos de Maisonet Vélez serán expuestos en la funeraria Melvin Amador, en Camuy, a partir de las 7:00 de la noche de hoy.

Un gas letal

El  monóxido de carbono (CO) es un gas sumamente peligroso.

 Según estadísticas del Centro  para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), se estima que anualmente unos 400 estadounidenses mueren y otras 4,000 personas son ingresadas en instituciones hospitalarias por accidentes relacionados con el CO.

  Es un gas  que está presente en el humo de combustión que expulsan los automóviles, estufas, sistemas de calefacción, entre otros aparatos. 

 En un lugar sin circulación, puede provocar la muerte.  La mayoría de sus síntomas se relacionan con dolor de cabeza, debilidad muscular, vómitos y confusión. 

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