El Tribunal Supremo de Puerto Rico paralizó esta tarde la implementación de la videolotería tras acoger para revisión el caso presentado por la Asociación de Hoteles y Turismo de Puerto Rico.

En la resolución, se prohíbe al secretario de Hacienda, Juan Zaragoza, "cualquier acto dirigido a hacer viable los mecanismos de videolotería".

La Asociación había presentado una moción de auxilio de jurisdicción al Supremo, que fue avalada por la mayoría de los jueces asociados, con excepción de la jueza Mildred Charneco Pabón, que no intervino, y el juez Roberto Feliberti, que se inhibió. 

La jueza presidenta, Maite Oronoz, y los jueces asociados, Anabelle Rodríguez y Ángel Colón Pérez proveerían no ha lugar a la solicitud de la apelación.

Por su parte el presidente de la Junta de Directores de la Asociación de Hoteles y Turismo de Puerto Rico, Miguel Vega, reaccionó complacido con la determinación del  Supremo.

“La paralización de los procedimientos para implantar este juego tan nocivo nos llena de esperanza a todos en la industria turística en Puerto Rico. El turismo debe ser visto como puntal de la recuperación económica y la videolotería supondría una estocada mortal a la industria turística”, reaccionó Vega. 

“El Departamento de Hacienda pretendía establecer la videolotería sin tener el aval de la Rama Legislativa, ya que por los pasados diez años la Legislatura rechazó consistentemente abrir espacio a este juego conocido como el “crack-cocaine” de los juegos de azar”, expresó 

Vega alegó que por años ha existido un cabildeo en cuartos oscuros por parte de la compañía Caribbean Cage para la aprobación de dichos reglamentos. 

“Es bien lamentablemente, aun cuando está bajo la consideración del Tribunal Supremo, sabemos que la compañía Caribbean Cage ha estado en conversaciones en el Congreso de los Estados Unidos y con la Junta de Supervisión Fiscal para presentar la videolotería como la salvación a la aguda crisis que vive Puerto Rico”, precisó. 

“La recuperación económica de Puerto Rico necesita una industria turística fortalecida, que incluya más visitantes, y continuidad  en la promoción y mercadeo del destino. Sin embargo la solución que propone  Caribbean Cage con la videolotería- sería poner a nuestra gente a jugar desenfrenadamente  en los  barrios y comunidades—que redundará en más pobreza y problemas sociales", concluyó el hotelero.