La Policía ya tiene un cuadro bastante claro de qué motivo la balacera que el jueves en la noche dejó heridas a una madre y su hija de cinco años mientras viajaban como pasajeras en un auto Volkswagen Beetle en Canóvanas y también la identidad de los sicarios que abrieron fuego en su contra. 

Según la teoría de los investigadores, la balacera que hirió a Jeidilis Michel Rosado, de 21 años y su hija de cinco fue motivada por un acto de venganza dirigido a la pareja de la mujer que conducía el auto, que no es identificada por motivos de seguridad. La testigo, que no ha estado disponible para ser entrevistada por la Policía, fue pareja de Alexis Correa Peña, ejecutado mientras viajaba en un auto junto a su esposa y su madre el 27 de marzo de 2012 en Carolina.

La mujer ni siquiera ha sido localizada a pesar de que los agentes tienen dos direcciones distintas.

La niña recibió un disparo en el pecho y convalece en condición de cuidado en el Centro Médico, de Río Piedras. Su madre, está en condición estable tras recibir disparos en la mandíbula y la pierna izquierda. Ambas viajaban en el auto junto a la testigo el jueves en horas de la noche por la carretera PR-188 de San Isidro cuando ocurrió el ataque.

Según las autoridades, la agresión estuvo motivada por rivalidades entre bandos distintos del llamado “bajo mundo”. Aunque el auto tiroteado es propiedad de Rosado, la Policía supo que el hombre había sido visto en ese vehículo por la amistad que los unía. 

La pesquisa está en manos de la Sección de Agresiones de la División de Homicidios en Carolina.