Río Grande.- La Policía investiga si el hombre que fue asesinado esta madrugada en Río Grande habría sido acechado por los sicarios que le dispararon frente a su residencia en la carretera PR-959 del barrio Ciénaga Ata de Río Grande.

El sargento Diego Mitchell Vázquez, del Distrito de Río Grande, indicó que por lo que se observó en la escena, no se podía descartar que los pistoleros esperaban o siguieron a la víctima hasta su casa.

"Entiendo que debió haber sido acechado", dijo Mitchel Vázquez en la escena. "Estamos en una etapa preliminar de la investigación para realmente dar con el móvil que llevó a esto".

Familiares que llegaron hasta la casa, algunos de los que se mostraron conmocionados al encontrar la escena, identificaron a la víctima como Ángel Hiram Rivera Toledo, de 24 años de edad.

El sargento explicó que, al ocurrir la balacera, una persona que llegaba con Rivera Toledo a la casa logró escapar en un vehículo que fue encontrado a cerca de una milla de distancia del lugar. Partes del auto tenían sangre y huecos producto de impactos de bala. Además, el cristal trasero quedó roto.

"Había una persona que lo acompañaba y esa persona salió ilesa de la situación y rápidamente se movió al área de Estancias (también en Río Grande). De allí ella misma llamó (al sistema de Emergencias 911)", indicó Mitchel Vázquez.

En horas de la tarde, la Policía divulgó una ficha de Rivera Toledo en la que se indica que en el 2013 enfrentó cargos por homicidio negligente, pero se desconoce el desenlace judicial de este caso.

El asesinato Rivera Toledo fue uno de tres asesinatos que se reportaron en un periodo de cinco horas en varios municipios de la Isla en la madrugada del lunes.

El primero había sido reportado a las 2:30 de la madrugada en la carretera 401 de la Urbanización Country Club en Carolina. Los investigadores encontraron allí sobre 20 casquillos de bala cerca del cuerpo de un hombre cuya identidad no había sido divulgada.

La fiscal Johanna Pérez indicó que la mayoría de los disparos habían sido dirigidos a la cabeza del hombre.

"Tenía una correa atada a una de sus manos", indicó Pérez.

"Pero todo está bajo investigación. Es bien preliminar", agregó la fiscal, quien aseguró que no encontraron identificación de la persona.

Se estima que el occiso tiene entre 25 a 30 años, es de tez blanca y pelo negro. Vestía de pantalón crema y camisa gris, al momento de los hechos.

El otro asesinato ocurrió a eso de las 5:00 de la madrugada de este lunes en el casco urbano de Guayanilla, donde un hombre murió tras recibir múltiples disparos.

Según la investigación preliminar, la víctima Peter Santos Quiñones Mattei, de 26 años, había compartido con su pareja en un negocio durante la madrugada y cuando salió fue baleado por los ocupantes de un vehículo que se bajaron para dispararle. Agentes de la División de Homicidios de Ponce se hicieron cargo de la investigación.

Según la Policía, la cifra de muertes violentas en lo que va del año asciende a 117.

El reportero Javier Colón Dávila colaboró con esta historia