Edmarie Raquel Lafontaine Pérez, una joven de 21 años, está desaparecida desde el pasado 26 de enero y su madre Manuela Pérez teme que sea víctima de una red de tráfico humano.

Lafontaine Pérez, natural de Humacao y quien fue descrita como de 5'7" de estatura, 115 libras, pelo largo teñido y ojos marrón, se trasladó a Miami presuntamente engatusada por un hombre natural de India a quien se cree conoció mientras trabajaba en el restaurante Sea Bar en Palmas del Mar.

La madre de Edmarie, cree que el deseo de su hija de convertirse en artista la puso en una situación de vulnerabilidad y cree que terminó atrapada en medio de una red de tráfico de mujeres para prostitución de la que intentó salir sin éxito.

A raíz de la investigación del caso que llevan la Oficina de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-HSI, por sus siglas en inglés), el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) y la Policía de Miami Dade se han arrestado a tres personas relacionadas a este caso. Una de ellas es un alegado proxeneta.

Pero, según Pérez, ninguno de los hombres ha dado información que ayude a dar con el paradero de la joven.

"Parece que el individuo conocía el "profile" de ella y le fue comiendo la oreja, le envió por email sus pasajes. Ella tenía un sueño de ser artista", dijo Pérez en entrevista telefónica.

La joven recibió los pasajes y se trasladó a Miami el pasado 24 de noviembre sin decirles a sus familiares. Una vez allá, llamó a su mamá y le dijo que estaría en Miami dos días, que había ido en búsqueda de su sueño.

"Cuando se fue me dijo ya tu verás mami voy a conseguir muchas cosas", contó la mujer.

No obstante, los dos días pasaron y Edmarie no regresó. Cada vez que su mamá le recriminaba por sus actos y trataba de conseguir más información de sus actividades, la joven evadía contestar y le respondía recordándole que ella ya tenía 21 años.

Así pasaron las semanas y Edmarie y su mamá se mantuvieron en contacto telefónico a diario desde el día en que partió a Miami.

A insistencia de su progenitora Edmarie vino a la Isla del 23 al 28 de diciembre. En esa visita narró a sus familiares lo bien que le iba, que trabajaba en un restaurante llamado Casa Cuba y que se ganaba como $600 diarios por las propinas recibidas.

El restaurante resultó ser ficticio.

"Tratamos de convencerla para que no se fuera, pero ella nos decía 'yo me tengo que ir. Yo voy a ser una artista'", continuó Pérez, mientras recordaba que Edmarie regresó a Puerto Rico cambiada físicamente y con regalos "caros".

Luego, el 12 de enero de este año, Pérez hizo un viaje a Colorado y de regresó hizo escala en Miami. En esa oportunidad visitó el condohotel Candlewood en el que se hospedaba su hija.

No notó nada fuero de lo normal.

Sin embargo, a historia de Edmarie tomó un giro sombrío a partir del 24 de enero. Ese día en su llamada a Pérez, la joven se mostró "triste", "deprimida" y hasta "malcriada".

Por todo ese periodo en que estuvo fuera de Puerto Rico, la joven utilizaba el teléfono celular que se llevó de la Isla para comunicarse con su mamá.

El 26 de enero, la preocupación de Pérez por su hija llegó a altos niveles. La joven llamó en siete ocasiones desde un número restringido a su mamá. Le dijo que tenía miedo. Fue el último día que Pérez escuchó a su hija.

"Me dijo que tenía miedo. Que temía por su vida. Que ella era más lista que ellos, que no la iban a encontrar. Estaba diciendo muchas incoherencias. Estaba bien desesperada. Creo que hasta estaba bajo los efectos de alguna droga. Decía muchas cosas incoherentes", recordó la mujer.

El 27 de enero, Pérez viajó a Miami, se trasladó a Fort Lauderdale, a donde creía que su hija se movió tratando de protegerse. Pérez luego regresó a Miami y notificó a las autoridades, pero no fue hasta dos días después de llegar a Florida que las autoridades tomaron el caso. En un principio, según contó Pérez, la despacharon diciendo que la joven es mayor de edad y que el que se haya desaparecido es algo que ocurre con frecuencia en los Estados Unidos.

Las sospechas de Pérez de que su hija es víctima de tráfico humano responden a notas que encontró en la habitación en que vivía.

Según Pérez, el presunto proxeneta detenido con relación al caso de Edmarie no ha confesado ni ofrecido información que ayude a dar con el paradero de su hija.

"Él no habla. Él dice que ella le dijo que se iba a Puerto Rico", dijo.

El coordinar de asistencia a víctimas y testigos de la oficina de investigaciones del ICE-HSI en Miami, Arthur Corrieri, confirmó que hay una investigación en curso, pero no ofreció más detalles.

A pesar del tiempo sin saber de ella Pérez confía en encontrar con vida a su hija.

"Claro. Yo lo siento en mi corazón. Yo espero que ella esté viva. Yo le he suplicado tanto a Dios que sé que me la está protegiendo, me la está cuidando", contestó sollozando.

A través de este medio, Pérez le envió un mensaje a Edmarie y le dice: "Que sepa que su mamá y su papá estamos aquí. Que su familia la queremos con todo el corazón y estamos aquí esperándola con mucho amor como siempre para ella".

Mientras, un vocero del Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos (Homeland Security) en Miami, Néstor Yglesias, confirmó que un grupo especializado en delitos de tráfico humano del Departamento de Investigaciones de Seguridad Nacional están investigando el caso de la joven boricua. No obstante, el funcionario no proveyó detalles.

"Como es un caso que está abierto y hay una investigación no podemos dar información. No podemos hablar del caso", dijo Yglesias.

Sin embargo, el portavoz pidió a la ciudadanía que, de tener información sobre la desaparición de la chica, se comuniquen a la línea informativa de la agencia al 866-347-2423.

A pesar del tiempo sin saber de ella Pérez confía en encontrar con vida a su hija.

"Claro. Yo lo siento en mi corazón. Yo espero que ella esté viva. Yo le he suplicado tanto a Dios que sé que me la está protegiendo, me la está cuidando", contestó sollozando.

A través de este medio, Pérez le envió un mensaje a Edmarie y le dice: "Que sepa que su mamá y su papá estamos aquí. Que su familia la queremos con todo el corazón y estamos aquí esperándola con mucho amor como siempre para ella".