Los agentes de la División de Robos de Carolina confían en que esta misma noche dos individuos detenidos en Canóvanas y quienes se sospecha forman parte de una pandilla que ha aterrorizado a decenas de personas al perpetrar decenas de robos en Carolina y San Juan, podrían ser sometidos a ruedas de confrontación para someterle cargos criminales, de ser identificados positivamente por algunos de los perjudicados.

El comandante Jesús Rivera Colón, director del Cuerpo de Investigación Criminal de Carolina, indicó a las 9:00 p.m. que las ruedas de confrontación no se habían realizado. Sin embargo, entrada la noche persisten trámites con ese objetivo. “Teníamos primero que localizar a los testigos”, indicó sobre el proceso que se inició esta tarde con el arresto de los dos individuos en el sector Villa Hugo, de Canóvanas.

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Rivera Colón dijo que la Fiscalía de Carolina cierra a las 12:00 a.m. y el Tribunal de Río Grande a las 2:00 a.m., por lo que los agentes dirigidos por el sargento Alberto Betancourt trabajaban contra el reloj. De no cumplirse con el proceso de identificación y la posible presentación de cargos esta noche, el trámite se reanudaría mañana, jueves.

“La idea es poderlos acusarlos por un robo. Los demás robos los sometemos después”, dijo Rivera Colón.

A uno de los individuos detenidos se le ocupó un arma de fuego.

Por otro lado, el coronel Antonio López, superintendente auxiliar de Investigación Criminal, confirmó que ya tienen identificados a cuatro de los siete miembros de la organización criminal, todos con antecedentes penales, a quienes les siguen la pista muy de cerca. 

El martes, por la noche, patrulleros estuvieron a punto de arrestar al menos a cuatro de los sospechosos, después que se registró un robo domiciliario en el apartamento de unos comerciantes de origen oriental, en el condominio Alturas de Monte Bello, en Trujillo Alto.

López, aseguró que este robo tiene características similares con varios de los casos previos que se le atribuye a la pandilla. Al grupo se le vincula con 14 asaltos, robos domiciliarios y hurtos de vehículos a mano armada en el área policíaca de Carolina cometidos entre el domingo y el lunes pasado. 

“Corresponde a la misma descripción, coincide con varios de los otros robos. Tenemos identificados a cuatro individuos que sabemos quiénes son”, detalló el coronel López. 

Varios de los individuos se encuentran en libertad bajo fianza por otros casos similares y en libertad bajo probatoria. En la pandilla hay al menos una mujer encargada de la transportación del grupo. Los sospechosos son del residencial Nuestra Señora de Covadonga en Trujillo Alto. 

El caso más reciente ocurrió este martes, a las 10:15 p.m., mientras la comerciante, propietaria de dos restaurantes de comida china, llegaba al condominio junto a uno de los empleados y fueron interceptados en el pasillo, cuando se disponían a subir las escaleras, por tres individuos que estaban escondidos en una de las esquinas del edificio, indicó la Policía. 

En esa ocasión, los individuos estaban enmascarados, llevaban puestos guantes y estaban armados con pistolas, según se desprende de la querella de los hechos. 

En el informe policíaco se reveló que cuando la mujer fue sorprendida por los enmascarados comenzó a gritar, pero le taparon la boca y la golpearon en la cabeza, obligándola a subir hacia el apartamento. 

Dentro de la vivienda estaban otros dos empleados del restaurante, que viven también en el apartamento y a todos los obligaron a acostarse en el piso mientras lo ataban con esposas plásticas color negras.

Mientras le exigían que les entregaran dinero, estuvieron buscando por todo el apartamento y se mantuvieron hablando por un teléfono celular con una persona que tenía voz de mujer y quien se presume es otra integrante del grupo. Se estima que la fémina se encontraba en el área del estacionamiento del condominio, vigilando que no llegara la Policía.

Cuando los hombres perpetraban el atraco, llegó al apartamento el esposo de la comerciante y su hijo menor, a quienes también agredieron para obligarlos a tirarse al piso, precisa el informe de novedades sobre el suceso. 

El trío de ladrones huyó con $16,000 en efectivo y también se llevaron del apartamento prendas, teléfonos celulares, las llaves de los negocios y documentos personales. 

También hurtaron las llaves de un vehículo marca Toyota RAV4, modelo 2013, con la tablilla AGR-451. 

Uno de los querellantes logró comunicarse con las autoridades al instante en el que los delincuentes abandonaron el apartamento. 

Este asalto se reportó mientras las autoridades le radicaban nuevos cargos por otro robo domiciliario al líder de la pandilla, identificado como José L. Correa Adorno, de 21 años, apodado Gordo y Taco Bell. 

La jueza Evyanne Mártir Hernández, del Tribunal de Carolina, expidió una orden de arresto contra Correa Adorno con una fianza de $1.8 millones por un robo domiciliario ocurrido el 6 de agosto a las 5:20 a.m. en el barrio Saint Just de Trujillo Alto. Ese delito lo perpetró en compañía de otras personas, según la Policía.

Se desprende de la pesquisa sobre esos hechos que Correa Adorno, colaboró para amarrar a una pareja en su cuarto dormitorio, mientras agredía a dos menores, de 14 y 13 años, a quienes agarró por el cuello y el pelo para arrastrarlos. El individuo y otras dos personas se llevaron $800 en efectivo, teléfonos celulares y prendas valoradas en $1,200, dijeron las autoridades.

Contra Correa Adorno pesan otras seis órdenes de arresto con fianzas ascendentes a un millón de dólares, cuatro de ellas en jurisdicción del área de Carolina y dos del área de San Juan. 

El caso fue sometido por el agente Jeremy Morales. 

También se creó un grupo de trabajo integrados por agencias estatales y federales para arrestar a los otros miembros de la organización, entre ellos la mujer. Los asaltantes acostumbran a robar a mano armada automóviles de color negro con los cuales se transportan para cometer sus fechorías.

Las autoridades se mantienen verificando las confidencias que se continúan recibiendo a través de la línea confidencial 343-2020. 

Se habla de decenas de robos