Los padres de José Iván Trinidad Cotto, de 23 años, encontrado muerto el pasado miércoles, cerca de una cancha en Mayagüez, están citados para comparecer a principios de esta semana a la Comandancia de esa ciudad, como parte de la continuación de la investigación sobre el deceso del joven. 

Mientras, personal de la División de Homicidios espera por los resultados de varias pruebas del Instituto de Ciencias Forenses para determinar la causa de muerte.

Los investigadores dedicaron el sábado y el domingo a entrevistar allegados del joven, con el fin de tratar de reconstruir sus últimas horas de vida.

Por lo pronto la Policía investiga el caso como una muerte “sospechosa”.

El cadáver del joven, que inició estudios en el Recinto Universitario de Mayagüez en ingeniería de computadoras y luego cambió de concentración a contabilidad, fue encontrado por un ciudadano, en horas de la madrugada del miércoles, muy cerca de la cancha de baloncesto de la urbanización Alemañy, que colinda con el residencial Yagüez de ese municipio. 

Cuando finalmente la oficina de prensa de la Policía en Mayagüez divulgó el suceso el viernes, se indicó que el cuerpo no presentaba signos de violencia y así lo reiteró la inspectora Janice Rodríguez, directora del Cuerpo de Investigación Criminal (CIC) de Mayagüez, en una entrevista con este medio.

El cuerpo del joven, identificado como homosexual por el activista de derechos humanos, Pedro Julio Serrano, fue identificado mediante tarjetas de identidad que cargaba en una cartera. El teléfono celular del joven no fue ocupado y tampoco ha sido hallado entre sus pertenencias, supo este medio.

Trinidad Cotto vivía en un apartamento del casco urbano de Mayagüez.