Mientras se tramitaba la acusación contra Luis Gustavo Rivera por el asesinato del niño Lorenzo González Cacho, un manifestante solitario condenó enérgicamente la imputación en contra de ese ciudadano apodado El Manco.

“No te muestres indiferente, El Manco es inocente”, vociferaba el hombre frente al Centro Judicial de Bayamón portando un cartelón en el que criticó al Departamento de Justicia por la acusación criminal que se presentaría al cumplirse casi seis años del crimen del pequeño niño, ocurrido en su hogar, en Dorado.

“¿Cómo un manco va a ser el asesino?”, cuestionó a viva voz el ciudadano, quien se identificó como Humberto Pérez, vecino del sector Capetillo en Río Piedras.

Explicó que resolvió movilizarse a las inmediaciones del Centro Judicial “indignado por los abusos que se cometen en este país”.

Durante su protesta, opinó que acusan “ese pobre hombre para tapar no sé a quién”. También cuestionó por qué tardaron tanto para someter cargos criminales al tiempo que agitaba el cartel con el mensaje: “Maldita sea la justicia selectiva”.

El hombre preguntó a gritos cómo nadie en la casa acudió a proteger al menor y ponía en entredicho las circunstancias divulgadas por años sobre el asesinato que ha consternado al país. “¿Cómo no escucharon los gritos de ese niño?” vociferó al referirse a la madre del menor, Ana Cacho, y varios amigos de la mujer que se encontraban en la residencia la noche del crimen, según información recopilada por la Policía. 

La protesta ocurría mientras en el tribunal un grupo fiscales encaminaba las acusaciones contra Rivera, en el pasado considerado improcesable y cuya condición mental ha sido puesta en entredicho por las propias autoridades.