El resto de la prueba es “contundente”.

La secretaria del Departamento de Justicia, Wanda Vázquez Garced, entiende que no hay evidencia que revierta el veredicto de culpabilidad contra Juan Carlos Meléndez Serrano y Antonio Ramos Cruz por la muerte de Haydée Maymí y sus hijos de cinco y dos años en medio de un crimen que estremeció a Trujillo Alto en 1989.

Los convictos solicitaron un nuevo juicio en 2011 cuando un análisis de comparación de cabello con tres vellos púbicos que aparecieron en la ropa interior de la víctima determinó que no eran de ellos. Sin embargo, para la jueza Berthaida Seijo los resultados no eran suficientes para revocar la sentencia unánime de culpabilidad emitida en 1992.

Vázquez sí aclaró que evaluará caso a caso todas las peticiones basadas en la Ley de Anlaísis de ADN Post Sentencia (Ley 246) Pero en este caso, que se ventila en el Tribunal de Primera Instancia de Carolina, no ve la necesidad. Además, testigos presenciales ubican a los convictos en la residencia de Maymí la noche de los asesinatos.

“Los testimonios fueron corroborados por prueba independiente, pertinente y cuyo valor probatorio rebatió la presunción de inocencia de los imputados Juan Carlos Meléndez Serrano y Antonio Ramos Cruz”, dijo la titular de Justicia. “(…) la alegada nueva prueba ni es pertinente a la inocencia o culpabilidad de los acusados ni de ninguna manera reflejaría un cambio en el resultado de la convicción a la que llegó el jurado. Por lo anterior, nos reafirmamos en la culpabilidad absoluta de los hoy convictos”, agregó en declaraciones escritas.

La vista de solicitud de nuevo juicio continúa en marzo.