La senadora Rossana López insistió ayer en la renuncia de Héctor Pesquera, secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP) ante la situación de “inseguridad y criminalidad” que vive la Isla.

López reiteró la petición y dijo que esto “no es un acto político, sino en evidencia de lo que está viviendo nuestro país”.

La legisladora hizo los señalamientos en su turno inicial de la sesión ordinaria y en respuesta a la petición de su homólogo popular José Luis Dalmau -a sus compañeros de ese cuerpo- a que se unan a favor de la medida que presentó el lunes para eliminar el DSP.

López, quien dijo que en Puerto Rico nadie se siente seguro excepto Pesquera, argumentó que una muestra de que el funcionario no debe estar en ese puesto es que el gobernador Ricardo Rosselló le quitó de las manos la investigación de las muertes ocurridas en Puerto Rico tras el paso del huracán María.

Enumeró los problemas que enfrentan agencias que están bajo la sombrilla de seguridad como: la crisis en el Sistema de Emergencias 9-1-1, donde las ambulancias no llegan a tiempo, así como la pésima situación que enfrenta el Cuerpo de Bomberos, “donde solo hay un camión con plataforma aérea”.

De su parte, el senador independiente José Vargas Vidot, cuestionó, “la magia que tendrá este señor (Pesquera) que logra cautivar con algún tipo de encanto, que no reconozco, para que permanezca en esta posición, casi inamovible, frente a tantos fracasos”.

De otro lado, el senador novoprogresista Henry Neumann dijo que se opone a la eliminación del DSP por que esa entidad no es el problema.

Aseguró que las sombrillas de seguridad han funcionado en Estados Unidos y otros países, pero que el problema que hay en Puerto Rico “es que tenemos una Policía completamente desmotivada. Esto no tiene que ver con Pesquera. Podemos reemplazarlo hoy y los problemas van a ser los mismos”.

Agregó que tampoco los problemas del Negociado de Ciencias Forenses y del 9-1-1 tienen “nada que ver con la sombrilla”.