Aprovechando un viaje a Dallas para visitar y disfrutar de la compañía de su hija, yerno y nietos, Flor Meléndez no perdió tiempo para gozarse otra de sus pasiones al ver buen baloncesto. 

En esta ocasión vio a su nieto y miembro del Equipo Nacional Juvenil de Puerto Rico, Jhivan Jackson jugar en su liga en Dallas. Y luego en la noche se fue a ver a José Juan Barea y los Mavericks jugar ante los Pelicans de Nueva Orleans.

Pero su visita no fue desapercibida. Luego de ver a José Juan Barea marcar 13 puntos en favor de la victoria 107-98, Meléndez recibió el trato que se merece como gran hombre de baloncesto al tener acceso a las grandes facilidades de la casa de los Mavericks. Acompañado por José Juan Barea, el entrenador se paseó en el camerino y hasta conversó su ratito con Mark Cuban, el colorido dueño de los Mavericks. También tuvo su tiempo de charla con el dirigente de Dallas, Rick Carlisle.

Nada, que Meléndez recibió un paso VIP porque él es un VIP de verdad. Enhorabuena.