El juez Alfredo Martínez Piovani, del Tribunal de San Juan, determinó durante la tarde de este viernes causa para arresto contra tres de los cuatro sospechosos de asesinar a la fiscal Francelis Ortiz Pagán el pasado 19 de enero, frente a su hogar en el barrio Guzmán Arriba de Río Grande, señalándoles $5.5 millones de fianza a cada uno. 

En esta etapa del proceso, el Departamento de Justicia determinó no presentar cargos contra uno de los arrestados, quien resultó herido de bala en una pierna dos horas después del crimen de la fiscal en un residencial de ese municipio. Según fuentes allegadas a la pesquisa, este era el conductor del vehículo compacto color blanco por donde transitaban los sospechosos. 

Los demás fueron acusados por un cargo de robo de auto, un cargo de asesinato en primer grado, dos cargos por portación y uso de un arma, un cargo por disparar un arma y un cargo por posesión de un carro hurtado, para un total de seis cargos contra cada imputado.

Entre estos figura Rafael Aponte Peña, de 21 años, quien se entregó a la Policía en el cuartel de Juncos durante la noche de este jueves, luego de que las autoridades divulgaran su foto requiriendo la cooperación ciudadana para dar con su paradero. 

También se acusó a Daniel Vázquez Cubilete, de 20 años, residente del sector Asomante en el barrio Tejas, de Las Piedras. Este sufrió un accidente de tránsito en la carretera PR-183, de Las Piedras, el 24 de enero, mientras manejaba un vehículo Ford Fiesta color blanco, el cual fue hurtado el 20 de enero en Cayey. 

El tercer acusado es Abraham Rodríguez Cruz, de 21 años, de San Lorenzo, apodado Bebé Mella. 

Ninguno de ellos prestó la fianza de $5.5 millones que se les impuso, por lo que fueron ingresados a prisión.

De ser encontrados culpables, estos se enfrentan a cumplir una pena de hasta 200 años de reclusión.

La vista preliminar fue pautada para el 9 de febrero.

Pide perdón uno de los arrestados 

Durante su traslado hacia la sala de investigaciones del Tribunal de San Juan, Rodríguez Cruz murmuró la frase “que me disculpen”, cuando periodistas le preguntaron si tenía algo que decirle a los familiares de la fiscal, en especial a la hija de 5 años que quedó huérfana como consecuencia de los actos de la pandilla en medio de un intento de “carjacking”.

El resto permaneció cabizbajo sin hacer expresión alguna sobre su participación en el vicioso crimen que estremeció al país. 

De acuerdo con la investigación, mientras Ortiz Pagán, de 42 años, se encontraba en ruta hacia su hogar, fue divisada en una intersección por estos cuatro individuos, quienes decidieron seguirla para cometer un “carjacking” porque a uno de ellos le gustó el vehículo Mini Cooper que manejaba. 

Ninguno de los sospechosos tenía expediente criminal previo. 

El caso fue investigado por el agente Raúl Velázquez Paz, adscrito a la División de Homicidios de Fajardo, bajo la dirección del teniente Carlos Juan Nazario, director del Cuerpo de Investigación Criminal. 

Las denuncias del caso fueron preparadas por las fiscales Vanessa Marcano y Leilany Vargas.