Caguas - El juez Jaime Fuster Zalduondo, del Tribunal de Caguas, no encontró causa por el cargo de homicidio negligente que se le imputaba a Orlando Viera Díaz, por supuestamente causar un accidente la madrugada del 6 de abril pasado en Juncos que provocó la muerte de Sheila Marie Márquez Villegas, de 21 años, quien viajaba como pasajera en el vehículo todoterreno que conducía.

Fuster Zalduondo sí encontró causa para juicio contra Viera Díaz por guiar un vehículo todoterreno por la carretera PR-30 en dicho municipio pese a que la Ley de Tránsito prohíbe que estos vehículos discurran por las carreteras del país.

Específicamente el juez Fuster Zalduondo encontró causa por una violación al artículo 10.16 (n) en la modalidad grave de la Ley de Tránsito. Por este cargo, el hombre, de 31 años, se expone a una pena de tres años de cárcel.

Viera Díaz también enfrentará juicio por un delito menos grave por violación al artículo 7.01 de la Ley de Tránsito que tipifica como conducta ilegal que una persona maneje un vehículo bajo los efectos de bebidas embriagantes.

El juez señaló la fecha de la lectura de acusación para el 20 de octubre y del juicio para el 24 de noviembre.

Fuster Zalduondo tomó su determinación luego de escuchar el testimonio del agente investigador Ramón Martínez Santiago, último testigo de cargo durante la vista preliminar en alzada.

Como parte de su investigación, Martínez Santiago concluyó que el accidente no se trató de un "hit and run" como se había reportado inicialmente, sino que se trataba de un choque en el cual el vehículo todoterreno había impactado la motora en que la que viajaban Lezuil Amador e Ileana Arocho.

Sin embargo, el agente investigador reconoció a preguntas de la defensa que no estuvo presente en la escena del accidente y que su conclusión era diferente a la determinación del agente Ángel Velázquez Quiñones, quien estuvo en el lugar del accidente.

En su informe, Velázquez Quiñones concluyó que el incidente se trató de un "accidente desgraciado".

Durante su argumentación final, la fiscal Betzaida Quiñones Rodríguez, quien junto a la fiscal Marianne Santini Hernández representó al Ministerio Público, afirmó que el imputado actuó de forma negligente al guiar un vehículo todoterreno por una vía pública a exceso de velocidad y bajo los efectos del alcohol.

"Si no hubiera estando corriendo un ‘four track’ por la PR-30 esto no hubiera ocurrido (la muerte de Sheila Marie)", afirmó ante una sala repleta de familiares de la víctima.

"Este joven tomó la decisión de transitar por la carretera a exceso de velocidad y bebido", agregó.

El licenciado Francisco David Rivera Maldonado, quien junto al licenaido Carlos Vicky Morell Borrero representó a la defensa, afirmó que la prueba presentada por el Ministerio Público no probó las alegaciones de exceso de velocidad y de embriaguez imputadas en la denuncias.

"No se hizo prueba de embriaguez, ni de sangre", resaltó.

Para apoyar este punto, señaló que luego del accidente su representado presentó una conducta que reflejaba que estaba alerta al levantar el cuerpo de Sheila Marie de la vía de rodaje y colocarlo en el paseo y al darle respiración boca a boca.

Indicó también que su representado no causó el accidente y recordó que la testigo Ileana Arocho declaró que la colisión había sido causada por un Toyota color rojo, que se marchó de la escena.

En su réplica, la fiscal Quiñones Rodríguez afirmó que un agente que intervino con el imputado percibió un fuerte olor a alcohol en su aliento e insistió que el agente investigador del caso había descartado la versión del Toyota rojo.

Durante su testimonio directo, Martínez Santiago indicó que Lezuil Amador ofreció dos versiones de los hechos. En una versión dijo que el choque había sido entre el "four track" y la motora y en otra apuntó que el accidente lo había provocado un vehículo.