Como si se tratara de las piezas de un raro rompecabezas, un equipo de investigación procura conectar fragmentada información y evidencia obtenida en las últimas horas para poder precisar las circunstancias del triple asesinato ocurrido esta madrugada en el barrio Sonadora de Aguas Buenas. 

Al anochecer los agentes a cargo de la pesquisa no habían identificado oficialmente a la mujer y a los dos hombres que fueron ejecutados en el sector Los Pérez, en un tramo de carretera que conduce a la jurisdicción de Guaynabo.

La Policía informó que la matanza ocurrió a las 12:40 a.m. y que todas las víctimas fueron atacadas a tiros por la espalda. Además, trascendió que los disparos fatales fueron hechos a corta distancia.

El comandante del área de Caguas, coronel José Ramírez, detalló que las personas asesinadas tienen de 25 a 30 años de edad. Por la posición en la que estaban los cadáveres se teoriza que conocían al victimario o victimarios. 

En la escena de los hechos se recuperaron siete casquillos de calibre .40 y en el bolsillo de uno de los hombres asesinados fue ocupada una pistola marca Smith & Wesson calibre .45 con el número de serie mutilado. 

“No se sabe cómo llegaron al lugar, pero aparenta ser que no fueron secuestrados, que llegaron voluntariamente”, indicó el coronel Ramírez.

“Uno tiene un arma de fuego en el bolsillo. No sabemos qué pasó pero la situación surgió allí. Quizás fue algún tipo de transacción, algún tipo de reunión, en esta etapa no se descarta nada”, sostuvo. 

Al presente no hay querellas de personas reportadas desaparecidas en Caguas y Aguas Buenas, observó Ramírez. 

Personal de la División de Homicidios del área de Caguas se reunió con el personal del Cuerpo de Investigación Criminal del área de Bayamón para que se unan a la pesquisa ya que todo apunta a que por lo menos una de las víctimas podría ser un residente de Guaynabo que se había mudado para Cayey. 

Mientras se investigaba la escena del crimen, en la carretera PR-174, en el mismo barrio Sonadora fue localizado un automóvil marca Toyota Yaris color gris oscuro de 2015. El vehículo, registrado a nombre de un ciudadano de Río Grande presenta impactos en la carrocería que aparentan ser de rifle. Sin embargo, debido a que no se han identificado las víctimas, no ha sido posible conectarlo directamente con la triple matanza, observó el coronel Ramírez.

Este medio supo que dentro del vehículo se ocupó una bolsita con cocaína y una con marihuana. 

Una de las gestiones que llevarían a cabo los agentes es probar si el llavero ocupado en el bolsillo a uno de los individuos abre la cerradura del Toyota para poder enlazar ambas piezas de evidencia. 

Uno de los dos varones asesinados fue descrito como de tez trigueña, cabello negro, ojos marrones y con tatuajes no detallados en el brazo y la pierna derecha. El segundo hombre es de tez blanca, cabello negro, ojos marrones y presentaba dos impactos de bala en el cuello. 

La mujer, cuyo cuerpo yacía a orillas de la carretera, tiene impactos de bala en la espalda y fue descrita como de tez blanca, ojos marrones, 5’6” de estatura y cabello rubio. Al ser ultimada, vestía una camisilla negra, un mahón corto azul y tenis negros. 

Uno de los hombres vestía camisilla amarilla y mahón corto negro y el otro no tenía camisa y solo llevaba puesto un mahón azul y botas. Ambos individuos tenían bigote y chiva. 

El agente Ramón Martínez y la fiscal Rocío García realizaron la pesquisa preliminar.

Esta es la tercera masacre que ocurre este año. Todas han ocurrido en municipios del área este. 

El crimen múltiple más reciente ocurrió el 10 de mayo, a la 1:15 a.m., en la carretera PR-919, en el barrio Valenciano Abajo de Juncos. En ese lugar fueron asesinados Rubén González Cardona, de 24 años, Héctor Javier Lozada Torres, de 22 y Edwin Santana Cruz, de 28 años, todos vecinos del citado pueblo. 

Los tres jóvenes fueron mortalmente baleados desde un vehículo en marcha. Dos víctimas transitaban en un automóvil marca Suzuki Aerio del año 2003 y Santana Cruz en una motocicleta. Una mujer de 38 años, su hija de 17 y un joven de 19 resultaron heridos de bala en ese letal ataque Este triple asesinato aún no ha sido esclarecido. 

Mientras, el 15 de enero, en el Parque Las Mercedes, en Caguas, fueron asesinados César E. Molina León, de 28 años, Luis A. López León, de 22 y Lisander Delgado Sánchez, de 19, todos vecinos del barrio Beatriz en ese pueblo. Además en la balacera, ocurrida en un tramo de la carretera PR-183, resultó herido de gravedad un hombre de 27 años, vecino del lugar de los hechos. En el interior del automóvil Mitsubishi Lancer del 2011, en el que viajaban las víctimas se ocuparon tres pistolas y cuatro cargadores, según informó la Policía. 

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