Mucha gente habla baba de que hay que recortar el presupuesto del Gobierno, pero cuando llega la hora de la verdad es pura bazofia. Ahora que colgaron el IVA vamos a ver como nunca antes el cacareo de cortar gastos, pero es pura demagogia. Sin duda, todavía no entendemos lo sumamente profunda que es nuestra crisis. No solo en Puerto Rico este es el debate; el resto del globo también lo tiene porque decir eso es un mamey, el problema es hacerlo. 

En Estados Unidos, en Grecia, en España, en todos lados hablan de cortar, pero aunque decirlo sea “nice”, reducir gastos es bien difícil porque muchísima gente vive de y quiere esos gastos. Reducirlos implica echarse en contra a gran parte del electorado. Los mejores ejemplos son el Seguro Social y el Medicare, que todo el mundo sabe que o se hacen recortes gigantes o se van a la quiebra dentro de poco. Pero aunque el Partido Republicano de EE.UU. siempre habla de cortar esos gastos, no se atreve porque gran parte de sus votos sale de los viejitos que viven de esos dos programas. 

Cuando se hacen finalmente los cortes, la mayor parte de las veces son tímidos o cosméticos. Por ejemplo, tenemos la Ley 7 de despido de empleados públicos. Todo el mundo decía que el Gobierno contrataba demasiada gente, pero a la hora de botar temblaron. Los despidos de la Ley 7 solo redujeron el gasto público en $350 millones, pero el déficit era de $3,200 millones. Además, con todos los contratos que se dieron por el lado nunca se redujo en realidad el gasto al nivel necesario. 

Así que le tengo una propuesta genuina al gobernador Alejandro García Padilla, que también le hice al anterior gobernador Luis Fortuño y a Aníbal Acevedo Vilá. Se llama “Zero Base Budgeting” o “Presupuesto Base Cero”. Esto es el diablo en bicicleta, pero es indispensable hacerlo. Esto es doloroso, fuerte y sumamente largo. Y para lograr que realmente funcione hay que ponerle un poquito de pique político. Así que la propuesta es la siguiente:

Gobernador, convoque a una sesión permanente o pida a la Legislatura de su partido que se autoconvoque como si fuera una sesión de interpelación. También invite a los partidos de oposición. Que cada jefe de agencia, cada una de las 62 agencias del Ejecutivo, las 4 de la Rama Judicial, 7 de la Rama Legislativa y las 43 corporaciones públicas tengan -cada una de ellas- que sentarse frente a TODA la Legislatura y oposición política y que se televisen esas vistas. Y que se pase gasto a gasto, línea por línea, el presupuesto de cada agencia. Que se tenga que justificar cada centavo. Esto va a tomar meses, pero es para que cuando llegue la hora de que digan cortar, se tenga que expresar todo el mundo. 

Por ejemplo, cuando se diga que se donan $200 mil para el Hogar Niñito Jesús, yo quiero escuchar quién se atreve a decir que hay que cortarle el dinero a los niños maltratados. Uso este ejemplo porque varios legisladores han ido a mi programa y han dicho que hay que eliminar los donativos legislativos, que totalizan $250 millones. Pues precisamente de ahí es que sale el dinero para ese y decenas de otros hogares y organizaciones de autistas, madres solteras, centros y corporaciones sin fines de lucro.

Quiero escuchar a legisladores del PPD y del PNP decir que hay que cortar la Comisión Estatal de Elecciones, o decir que hay que parar el Tren Urbano, la AMA y las lanchas de Vieques y Culebra, que dejan pérdidas anuales de $300 millones entre esas tres cosas. Quiero escucharlos decir que hay que sacar a 400 mil beneficiarios de la tarjeta de Rosselló o Mi Salud, que de $600 millones que costaba en 1997 ya va por $2,700 millones y subiendo con un déficit anual de $300 millones a $500 millones. Quiero escucharlos decir qué gasto se queda y cual se va para que usted vea que cacarean de cortar, pero a la hora de la verdad reculan. Quiero escucharlos diciendo que corten el dinero de los subsidios a los residenciales públicos e iglesias, etc. Que obliguen a la Rama Judicial a digitalizarse en menos de 24 meses y se le recorte el equivalente a la suma de todas las subastas de compra de papel e impresoras a ver si el gas pela y no es baba. 

Que se vaya una a una de las escuelas y se tenga que justificar su permanencia y cada plaza de empleo y si no se justifica, quiero escuchar a la Legislatura de mayoría y minoría decir que se corte. Igual que todos hablan de captar mejor el IVU y que Hacienda fiscalice mejor,  pero no lo hace ni el PNP ni el PPD.

Digo todo esto de esta forma porque es bien fácil decir que vamos a cortar el presupuesto en $1,000 millones, pero vamos uno a uno, línea por línea, para que cuando salga que hay que eliminar el municipio de Toa Baja (el peor que está), a Ponce, San Lorenzo, Yauco y otros verán gente gritando, o que hay que eliminar la escuela de Hato Tejas o la oficina de Asuntos de la Juventud de Mayagüez o los fondos para la Casa Protegida Julia de Burgos, o la Oficina del Procurador del Paciente, o el Tribunal de San Lorenzo, o el subsidio de luz para los municipios, que son los que alumbran las carreteras de sus pueblos. Quiero escucharlos para que usted vea que es pura baba eso que dicen. De hecho, con todos esos gastos que he mencionado para cortar como ejemplo no se llega a los $1,000 millones que alegan que hay que cortar. Así que serían esos recortes y muchos más. 

De hecho, hay otros gastos que eliminar que no son tan importantes como los anteriores, pero nuestro boquete fiscal y la deuda (que hasta hoy no hay forma de que se pague) es mucho más grande que cortar aquello que creemos que es grasa. Para que sepa, ya hace tiempo en el Gobierno se eliminaron los carros 24 horas en las corporaciones públicas, se eliminaron las dietas y carros en la Legislatura, la inmensa mayoría de los celulares, etc., y seguimos en el boquete. Aún queda por cortar y en el pasado he dado propuestas concretas. He hablado de eliminar la Comisión Estatal de Elecciones, en la que gastamos $38 millones al año; he sugerido eliminar todo edificio privado rentado por agencias o corporaciones públicas, lo que totaliza sobre $200 millones; las aportaciones a los partidos políticos; los servicios de lanchas; el tren; la AMA; el brazo prestatario del Banco Gubernamental de Fomento; recintos de la UPR; el Ombudsman. He hablado de eliminar 50 municipios y al menos la mitad de las oficinas regionales del Departamento de Salud, del DTOP, de Recreación y Deportes, etc., y aún con todo eso me quedaría corto para poder reducir todo lo que implica nuestra deuda, que el año que viene totaliza $5,200 millones y hay que pagarla. Si buscan en mis columnas anteriores, he dado decenas de ideas de dónde se puede cortar (http://www.primerahora.com/jayfonseca-indicecolumna-917896/). También ahí podrán encontrar propuestas de nuevos recaudos que no les cuesten al bolsillo de las personas, pero hay que ser valientes y hacer cosas que a mucha gente no le gustan. 

Ahora, el punto es que el gobernador tiene la oportunidad de oro. Convoque a los partidos de oposición, a todos quienes han dicho que hay que cortar gastos y a quienes colgaron el IVA y vaya uno a uno con cada jefe de agencia y televise y que se decida uno a uno qué gasto se queda y qué gasto se va. Porque como dice Calle 13, que “tú digas poco porque sabes poco” se entiende, pero una vez sabes, si siguen con esa guasa merecemos la mier$\% que tenemos.