Un informe de la Oficina del Contralor sacó a la luz que conductores, mecánicos y técnicos de refrigeración y acondicionadores de aire laboraron, en ocasiones por varios años, sin tener las licencias al día.

 Según el informe, que cubrió el periodo entre el 1 de julio de 2010 y el 31 de diciembre de 2016, 38 de los 49 técnicos y mecánicos automotrices que trabajaron en la AMA en ese periodo no tuvieron su licencia vigente entre 3 y 1,489 días consecutivos.

De ese grupo que no tuvo su licencia al día, 4 eran supervisores de taller.

Además, 6 de los 49 mecánicos no estuvieron colegiados por entre 1 a 6 años

El grupo realizó un sinnúmero de labores relacionadas a la reparación de cablería defectuosa en el sistema eléctrico de las unidades, remplazo de partes chocadas, reparaciones de motor y transmisión, reparación de sistema de frenos, trabajos de inspección y mantenimiento.

La auditoría también halló que los 8 técnicos de refrigeración y acondicionadores de aire no estuvieron licenciados entre 95 y 1,072 días consecutivos. Uno de esos técnicos no estaba colegiado.

Asimismo, la auditoría revisó las licencias de 25 de los 352 conductores de autobuses de rutas regulares y el programa Llame y viaje, y encontró que 18 de los conductores tuvieron su licencia vencida entre 5 a 1,057 días consecutivos. Además, 15 conductores asistieron a la AMA entre 2 y 620 días laborables y condujeron con las licencias vencidas.

La auditoría advierte que esas situaciones constituyen violaciones de leyes, de los acuerdos del convenio colectivo de la unión TUAMA y del reglamento de personal de la agencia. Además, esas violaciones podrían perjudicar a la AMA en casos de demandas y reclamaciones de terceros por accidentes u otros hechos.

Asimismo, la agencia se expone a multas y la posibilidad de demandas judiciales por no tener a sus conductores con las licencias al día.

Un tercer hallazgo del informe reveló deficiencias en la administración del módulo de servicio de mantenimiento y reparación de las guaguas. De hecho, no se había establecido una reglamentación ni procedimiento para la administración del módulo.

Un examen a las órdenes de servicio reveló que, de 1429 órdenes entre julio de 2010 y diciembre de 2016, 299 no tenían el nombre del supervisor de talles, 322 no incluían el  nombre del tallerista, 314 no tenían la fecha en que la unidad fue referida para servicio, 25 no incluyeron la fecha en se completó la reparación, 45 no reflejaban la fecha de cierre de la orden.

Además, las órdenes de servicio eran revisadas y cerradas por la asistente administrativa, a pesar que no tenía la preparación académica para tales funciones.

Los supervisores de talle no registraron en las órdenes el tiempo que utilizaron los talleristas en los trabajos de mantenimiento y reparación, y revelaron que no existía un control en el registro de esas horas. La AMA no cuenta con una métrica para medir la productividad del personal de mecánica. Esa situación es contraria a los requerimientos de la Administración Federal de Tránsito (FTA, en inglés).

El informe encontró además irregularidades en el proceso de retirar unidades. En septiembre de 2016, en los predios del estacionamiento de empleados de la AMA había 8 autobuses en desuso y deterioro que fueron declarados inservibles entre mayo de 2012 y noviembre de 2015. El costo de esas unidades fue de $3,998,283 y su vida útil es de 12 años. Luego de estar fuera de servicio entre 10 meses y 4 años, la AMA determinó repararlos porque mantenían un interés federal de entre $205,996 y $305,257.

El examen para declarar los autobuses inservibles reveló que no se hizo un análisis para justificar declararlos inservibles, no se hizo un análisis para determinar el interés federal antes de declararlas inservibles, y tampoco se preparó un análisis para justificar la reparación y el costo estimado de la reparación.

El informe considera que varios directivos de la AMA no cumplieron de manera efectiva con sus funciones y fallaron en verificar que las licencias estuvieran al día y que se llevaran a cabo procesos adecuados para las labores de mantenimiento y reparación de las guaguas, así como para su retiro.

Reaccionala AMA

Los señalamientos, sin embargo, son cosas del pasado que se han estado corrigiendo, según explicaron tanto el director ejecutivo de la AMA, Santos M. Delgado Marrero, como el presidente del sindicato Trabajadores Unidos de la Autoridad Metropolitana de Autobuses (TUAMA), Alexis Merced Gutiérrez.

“Ahora mismo te puedo decir que todo el mundo está en ley. Hace una semana se hizo el escogido de turnos para las nuevas rutas regulares y todos los 231 conductores de rutas regulares están al día”, aseguró Merced, quien no presidía la unión para la época que cubre el informe.

El líder sindical agregó que el informe lo que señala son “errores de supervisión que se han corregido bajo la actual administración”.

“Hoy día, cuando estás como a un mes de que se venza tu licencia la gerencia avisa al compañero y a la unión. Y los de ruta regular, cuando pasan por el área de salida, ahí también se les avisa si tienen la licencia por vencer. Desde hace como año y medio se está haciendo así”, dijo Merced.

El director ejecutivo secundó las palabras de merced, reafirmando que los señalamientos datan de “un periodo más atrás”.

“Ahora establecimos un sistema mecanizado para que 30 días antes de que venza la licencia, el sistema levanta una bandera y envía una notificación para que el conductor o el técnico automotriz o de refrigeración pueda renovar su licencia, que es un requisito para poder hacer su trabajo”, explicó Delgado. “Ahora mismo, todos están al día. Hace poco hicimos escogido de turno por las nuevas rutas y todos los conductores pasaron, todos están al día”.

Merced dijo tener algunas dudas con las cifras de licencias de los mecánicos y técnicos de refrigeración, alegando que los números del informe salían de los respectivos colegios, y la información podía no estar al día. Agregó, no obstante, que ya se había corregido el problema.

Dijo además que tanto la cantidad de conductores como la de técnicos y mecánicos ha disminuido considerablemente desde la época del informe.

Sobre el retiro de autobuses, Merced comentó que era una práctica de la pasada administración, entre 2013 y 2016, y que llevó a que varias guaguas fueran “deshuesadas” para arreglar otras. Recordó, por ejemplo, la unidad 2010-12 que entró al taller por un sensor dañado. Otra unidad, la 2010-05 se había quedado por el aeropuerto “y lo que hicieron fue coger los módulos eléctricos buenos de la 2010-12 para ponérselos a la 2010-05. Y la 2010-12 la vinieron a arreglar este año. Estuvo parada como en garaje por cinco años. La deshuesaron y la vinieron a arreglar ahora, en esta administración, que se gastaron miles de pesos. Pero eso lo ordenó la gerencia pasada, que tuvo muchas deficiencias”.

Merced añadió que los autobuses que están hoy día para decomisar ya rindieron su vida útil y no tienen interés federal.

Delgado afirmó que ahora la AMA cuenta con “mecanismos para medir la productividad de los mecánicos”, con “métricas establecidas a través de sistemas de computadoras”.

Asimismo, el director ejecutivo dijo que habían encontrado autobuses retirados “que era posible repararlos”.

“Encontramos unidades que las habían retirado, y empezamos a revisar las razones y encontramos guaguas que eran reparables. Aquí hay mecánicos buenísimos. Así que lo que hicimos fue meterlos en las guaguas, junto con supervisores, mirar el desperfecto, documentarlo. Y entonces determinamos cuáles eran reparables, y compramos las piezas y se repararon”, dijo Delgado. “Ahora tenemos un mecanismo para hacer el análisis para decidir si el costo de reparación era menor que el interés o el valor actual de la guagua, pues se mandaron a reparar”.

“Ahora con menos personal, menos presupuesto, salen todas las guaguas a cubrir las rutas y todos los choferes. El problema era la gerencia. Los muchachos míos siempre han estado dispuestos a hacer el trabajo, solo necesito que des las herramientas”, insistió Merced. “Hoy día la unión y la gerencia estamos dialogando y tratando de empujar el barco hacia adelante”.

“Todos esos señalamientos se corrigieron y se pusieron en funciones procesos mecanizados para atender esas deficiencias que encontró el contralor”, reafirmó Delgado.