Amnistía Internacional Puerto Rico (AIPR) aprovechó la conmemoración hoy del Día Mundial Contra la Pena de Muerte para reiterar su oposición a la pena capital bajo cualquier circunstancia en la isla caribeña.

El director ejecutivo de AIPR, Pedro Santiago, señaló en un comunicado que el Gobierno de Puerto Rico debe enmendar el memorando de entendimiento con las autoridades de Estados Unidos que facilita su aplicación en ciertos casos bajo la jurisdicción federal.

"Le pedimos al Gobierno local que enmiende el memorando de entendimiento con las autoridades federales, de forma que mantenga jurisdicción de los casos que podrían ser procesados como de pena de muerte. En los últimos años ha sido evidente el rechazo generalizado del pueblo de Puerto Rico a la pena capital", indicó Santiago.

El comunicado recuerda que a pesar de que la Constitución de Puerto Rico prohíbe la pena de muerte este castigo podría imponerse en los casos que se encuentren bajo jurisdicción federal.

El memorando de entendimiento permite a las autoridades federales asumir jurisdicción inmediata en ciertos delitos violentos relacionados con drogas y armas, matiza el comunicado.

"La pena de muerte es un castigo cruel e inhumano en menoscabo del derecho a la vida de las personas y su dignidad. Seguiremos haciendo activismo y educando porque se ha demostrado que la pena de muerte no sirve para hacer frente a la criminalidad e incluso no hay nada que demuestre que la amenaza de la ejecución tiene un efecto más disuasorio que cualquier otra forma de castigo", sentenció Santiago.

Puerto Rico es un Estado Libre Asociado a Estados Unidos con Constitución propia y cierto grado de autonomía, aunque la nación norteamericana se reserva apartados como relaciones diplomáticas, control de fronteras o defensa, entre otros muchos.