Ayer sobró la alegría en el paseo Plaza del Mar, donde locales, turistas, seguidores y curiosos se juntaron bajo el sol del mediodía para disfrutar del proceso de pintura del mural y, claro, tomarse el selfie una vez culminada la pieza, que ahora queda como una gran bienvenida a los visitantes.

De eso se trata “78 pueblos y 1 bandera”, de promover el turismo interno, de trazar una ruta con cada una de las banderas que ayuden a mostrar y disfrutar los espacios y recursos del País, explicó Collazo Hernández,

“Ya se ha creado el trip que consiste en visitar todas las banderas de Puerto Rico, todas las banderas que he hecho en los municipios, pero creo que lo importante no es conseguir un destino y llegar a la bandera, lo importante es disfrutarse el camino, valorar lo que somos”, dijo el estudiante de enfermería minutos antes de que una seguidora le pidiera plantar un brochazo a una de las franjas blancas de la monoestrellada.

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“Me quitó la brocha”, anunció el pintor a gritos y la audiencia le respondió con aplausos y risas.

Y bien vale decir “seguidores” pues su página en Facebook (@hectorpr16) cuenta con más de 40,000 fans, muchos de los cuales se han dado a la tarea de seguir la ruta, tomarse fotos en las banderas y publicarlas en la red social.

Félix “El Cano” Delgado Montalvo es uno de esos seguidores que ha reconocido a Collazo Hernández, por lo que se planteó: “por qué en Cataño no puede haber una bandera de nuestra patria, que es de todos”.

Entonces, el flamante alcalde Cataño lo contactó, aunque por lo regular el pintor llega a los lugares sin invitación. 

“Esto no es solamente un arte, sino que va a ser parte del desarrollo cultural, turístico y económico de nuestro municipio”, dijo a Primera Hora el alcalde catañés.

Precisó que dentro de su proyecto de gobierno municipal y plan de desarrollo económico la cultura y las artes forman parte fundamental.

Otras iniciativas vienen en camino como una antesala al Día Nacional de la Salsa con eventos durante dos días y el desarrollo de un trayecto de chinchorros a la que dijo que llamarán “La Ruta del Amolao”, en honor al exalcalde Edwin Rivera Sierra.

La gente seguía llegando, preguntando qué pasaba, qué se celebraba y una vez sabían disfrutaban la gestión y uno que otro planteaba: “ya hay una bandera en mi pueblo”. 

Collazo Hernández no había pintado antes de esta aventura que comenzó con una monoestrellada en Orocovis.

No es un artista de trayectoria, sino más bien un entusiasta que apuesta a la autogestión y que con ello parece haber logrado juntar voluntades y gente.

“Esto nació por amor al arte y a Puerto Rico”, afirmó Collazo Hernández.