Caguas - Basada en la premisa de que quienes conocen mejor una comunidad son las personas que allí viven, la puertorriqueña Melissa Mark-Viverito, presidenta del Concejo Municipal de Nueva York, promueve los presupuestos participativos entre sus constituyentes.

La iniciativa procura permitir que sean los residentes de las comunidades los que decidan directamente cómo gastar parte del presupuesto público explicó Mark-Viverito a legisladores municipales reunidos en el Centro de Bellas Artes de Caguas.

Durante la conferencia magistral de un foro de la Asociación de Legisladores Municipales de Puerto Rico, Mark-Viverito compartió su experiencia en el manejo de presupuestos participativos y el proceso para apoderar a las comunidades de sus proyectos de bienestar social y económico.

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Contó que para comenzar a ejecutar el modelo en la ciudad, en 2011, cuatro concejales formularon individualmente a grupos de neoyorquinos la extraordinaria pregunta de ¿cómo gastarían un millón de dólares en mejoras para tu comunidad?

Explicó que con las respuestas a esta interrogante, los vecinos comienzan a intercambiar ideas que son recogidas a través de correo electrónico, mensajes de texto y en una página de internet. 

Luego, en reuniones públicas, escogen delegados que tendrán a su cargo seleccionar una o varias propuestas que someten a la oficina de distrito de su concejal. Cada propuesta debe ser viable, tener impacto en la comunidad y cubrir alguna necesidad, destacó la boricua nacida en Bayamón.

Según Mark-Viverito, los proyectos se exponen en internet y los residentes votan por los cinco que son de su mayor interés. Al final, se asigna el dinero para la implantación de los proyectos que más votos reciben en áreas como salud, seguridad, educación, recreación, y cultura.

“Entendemos que este dinero viene de las contribuciones que pagan los ciudadanos de Nueva York, así que este dinero les pertenece a ellos. El presupuesto participativo da a la gente poder real para tomar decisiones reales con dinero real”, acotó Mark-Viverito.

Pero el proceso no termina ahí.

El Concejo Municipal debe designar un comité de seguimiento para supervisar el progreso de los proyectos ganadores y mantener al tanto a los distritos, precisó al desglosar parte de la distribución presupuestaria basada en el modelo abierto a la directa participación ciudadana.

En septiembre de 2014, Nueva York comenzó el cuarto ciclo de presupuesto participativo en el que se asignarán $30 millones a ser distribuidos entre las comunidades. Ya se realizaron unas 127 asambleas comunitarias en las que se presentaron 1,700 ideas. Actualmente, los delegados trabajan en las propuestas de proyectos que se llevarán a votación entre marzo y abril.

La idea de presupuestos participativos ha sido adoptada por la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz Soto, quien también expuso su experiencia en el evento efectuado en Caguas.

Cruz Soto aludió a la implantación del modelo con las comunidades del Caño Martín Peña, el residencial Luis Lloréns Torres, Venus Gardens y Caimito. Entre estas cuatro comunidades, se repartió un millón de dólares que se ha puesto en uso según un modelo de cinco etapas, muy similar al que se utiliza en Nueva York.

Primero, explicó Cruz Soto, las comunidades se reúnen para discutir sus ideas, luego los delegados elaboran las propuestas, exponen los proyectos, se realiza la votación y finalmente, llegan a la etapa de implementación monitoreo y evaluación.

Entre las ganancias de la iniciativa, la ejecutiva capitalina mencionó que la gente aprende a ponerse de acuerdo, se da cuenta de que hay prioridades y conoce de primera mano cuáles son las limitaciones del presupuesto y, al final, velan porque los compromisos contraídos se cumplan.

El alcalde de Caguas, William Miranda Torres, anfitrión de la reunión, recordó que el asunto de la gobernanza democrática que se propone con el modelo de presupuesto participativo era una de las pasiones de su fenecido padre, William Miranda Marín.

“El modelo colaborativo gobierno-ciudadanía reconoce que solo el trabajo en alianza es capaz de producir cambios económicos y sociales”, expresó. Miranda Torres señaló que tras 18 años de haberse constituido en el municipio la llamada gobernanza democrática, Caguas cuenta ahora con 200 comunidades organizadas que han adelantado más de 50 proyectos de agua, carreteras, recreación y deportes, tecnología, empresarismo comunitario y seguridad vecinal.

Durante la actividad, también estuvieron presentes los presidentes del Senado y de la Cámara de Representantes, Eduardo Bhatia y Jaime Perelló, quienes coincidieron en que el modelo debe seguir replicándose en otros municipios de la Isla.

“Nunca le preguntamos a la comunidad. Siempre le imponemos un proyecto. Me parece que trabajar con el presupuesto participativo es invertir el pensamiento público y yo quisiera que en Puerto Rico lo imitáramos en muchos más pueblos”, declaró Bhatia.

Perelló, por su parte, consideró que permitir la participación acerca al pueblo a las instituciones del país.

“No podemos tenerle miedo a la acción social y a que los ciudadanos se integren desde el inicio en las discusiones de los temas. Según la gente se va apoderando de los procesos y le das espacio para discutir, aumenta la confianza en las instituciones, se entienden aún más los problemas fiscales y las aportaciones son enmarcadas en la realidad del pueblo”, destacó el líder cameral. 

Resaltó como otro aspecto positivo del modelo de presupuesto participativo que las comunidades que toman decisiones sobre los proyectos que quieren, se convierten en protectoras de esa inversión.