Los municipios del este de Puerto Rico están sintiendo desde el amanecer los efectos directos de la tormenta Bertha, informó Ernesto Morales, subdirector del Servicio Nacional de Meteorología.

En los municipios de Canóvanas, Ceiba, Naguabo, Fajardo, Luquillo y Río Grande hay vigente un aviso de inundaciones repentinas hasta las 12:45 p.m.

A las 11:00 a.m. la tormenta Bertha se ubica en la latitud 17.2, longitud 66.7 con vientos máximos sostenidos de 50 millas por hora. Su movimiento de traslación sigue a 22 millas por hora. Se ubicaba a unas 90 millas al sur - suroeste de San Juan. El aviso de tormenta continua en efecto para Puerto Rico y República Dominicana.

Durante la tarde, se espera que la lluvia y los vientos de hasta 50 mph, también afecten el centro, sur y suroeste de Puerto Rico, según el pronóstico que brindó esta mañana por Morales en la rueda de prensa realizada a las 8:00 .am. en la sede de la Agencia Estatal de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Aemead), en la carretera PR-1 de San Juan.

“Es momentos de tener todas las previsiones de seguridad necesarias. No es momento de estar en la calle”, pidió entonces el gobernador, acompañado por su equipo de emergencias y gran parte del gabinete.

En cuanto a la trayectoria de la tormenta, Morales informó que el boletín de las 8:00 a.m. localizaba a Bertha en la latitud 16.7 norte, longitud 65.5 este.

“Se mueve a unas 22 mph hacia el este con vientos sostenidos de 50 mph. Los vientos se extienden a 115 millas del centro del sistema”, reportó.

Dos árboles caídos en San Juan

Los efectos de la tormenta Bertha ya comienzan a sentirse en el área de San Juan, donde dos árboles se cayeron en diversas vías de rodaje.

Según informó la Policía, a eso de las 8:50 a.m. un árbol cayó encima de un tendido eléctrico en la avenida Luis Muñoz Rivera, intersección con la avenida Manuel Fernández Juncos, sin dejar heridos. Este caso ya le fue referido a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

Mientras tanto, a las 9:15 a.m., otro árbol se cayó en la avenida Constitución, frente a la Casa Olímpica, cerca del Capitolio, en el Viejo San Juan.

En este caso, tampoco hubo personas afectadas, y se le reportó a personal de la Agencia Estatal Para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Aemead).

Pendiente a la lluvia, más que al viento

“Nos debemos enfocar en la gran cantidad de lluvia que ya está impactando el sur y el este de Puerto Rico”, precisó sobre la expectativa de precipitación de 3 a 5 pulgadas, con áreas que podrán recibir hasta 8 pulgadas.

Debido a que los cauces han recibido mucho menos lluvia de la usual en lo que va de año, “los ríos van a tardar en reaccionar”, explicó sobre la posibilidad de desbordamientos.

“Aun así, el equipo de e SNM está monitoreando 24/7 los niveles de los ríos y las lluvias”, agregó.

Peligro en el mar y los ríos

Entretanto, Morales indicó que las condiciones marítimas están muy deterioradas desde anoche, con olas de 9 a 12 pies que se agravan con la intensidad de los vientos.

Por su parte, el gobernador varias veces hizo hincapié en la peligrosidad del mar y los ríos debido al azote del fenómeno.

“Por favor, no intenten cruzar ríos crecidos. Es algo que suena obvio, pero pasa tantas veces”, advirtió García Padilla, quien destacó que esa acción imprudente también pone en riesgo a socorristas.

Señaló además que, como el terreno está seco, puede estar compactado y la lluvia puede causar deslizamientos.

García Padilla hizo además un llamado a quienes practican el surfing. “No es que hay buenas olas, es que hay una tormenta”, indicó.

“Su pasión por el mar, las olas y las tablas, no puede llevarlos a poner en riesgo su vida”, insistió.

“Olas de 9 pies hacen el mar peligroso hasta para embarcaciones grandes”, puntualizó sobre el peligro a que se expondrían los entusiastas de este deporte y los operadores de embarcaciones pequeñas.

Por su parte, el director de Aemead, Miguel Ríos, indicó que durante la noche se continuaron los trabajos de preparación y limpieza usuales.

“Tenemos 239 refugiados en Arroyo debido a que había un torneo internacional de pequeñas ligas y fueron sacados como medida preventiva”, porque se estaban hospedando muy cerca de la costa”, explicó.

Además, hay 367 refugios disponibles.

En cuanto a los servicios esenciales, la secretaria de la gobernación Ingrid Vila señaló que había 800 abonados sin electricidad y 1,075 sin agua.

“Están dentro de los parámetros de normalidad”, aseguró.

Vila instó a las personas con viajes pendientes para hoy a llamar para informarse sobre el estatus de sus vuelos, porque se han reportado algunas cancelaciones.

Sin embargo, el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín continúa operando con normalidad, mientras las condiciones lo permitan.