Celebrar la Navidad no va contra los principios de los no creyentes o ateos.

A pesar de la fuerte presencia de símbolos cristianos durante las celebraciones, la comunidad atea de Puerto Rico, en su mayoría, no tiene problema en unirse a las fiestas con las que los creyentes recuerdan el nacimiento de Jesús, el hijo de Dios.

“Sí, celebramos la Navidad porque a fin de cuenta, esto es una fiesta cristiana, pero como a nosotros nos encanta leer y saber el origen de las cosas, al igual que ocurre con la pascua que era una fiesta pagana, que por eso se regala huevitos y chocolate, con la Navidad pasó lo mismo”, comenzó a explicar  Thalia Nazario Santiago, vicepresidenta de la organización Humanistas Seculares de Puerto Rico.

“La comunidad no creyente, como conocemos la historia celebramos igual, bailamos, comemos arroz con gandules y comemos morcilla”, dijo Nazario Santiago, aunque aclaró que ella no come morcilla porque es vegetariana.

“La primera mención del supuesto  nacimiento de Jesús en diciembre es del siglo cuarto... lo que se celebraba en diciembre era la llegada del invierno o el solsticio. Era una semana de fiestas”, asegura Nazario.

Por eso, aunque en la Isla, las Navidades son fiestas de fuerte connotación religiosa, no se oponen a las celebraciones.

“A quienes quizás le molesta un poco, lo marcado del cristianismo es a padres y madres que tienen hijos en escuelas públicas que hacen actividades religiosas que son ilegales e inconstitucional, al igual que en los trabajos, oficinas de gobierno que hacen círculos de oración, que son violaciones a sus derechos constitucionales”, detalló Nazario.

Sin embargo, fue enfática en decir que no hay problema en celebrar las pascuas, siempre y cuando el Gobierno no adopte como única la celebración cristiana.

Humanistas Seculares de Puerto Rico cuenta con 75 miembros bonafide y una comunidad virtual de 600 personas.