Los pronósticos a corto y largo plazo sobre la actividad de lluvia que se podría generar en la Isla serán factor determinante para que la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) y el Comité de Sequía determinen en las próximas semanas si el plan de racionamiento de los 140,000 abonados que se suplen de Carraízo regresará a la Fase 1, la cual consiste de limitar los servicios por periodos de 24 horas. 

Así lo confirmó este miércoles la portavoz de prensa de la corporación pública, Norma Muñoz, luego de que el embalse superar el nivel en que se encontraba cuando la AAA comenzó a imponer un plan de racionamiento. 

Actualmente, Carraízo está en 37.17 metros del nivel del mar. Para cuando se puso en vigor el plan de racionamiento de 24 horas, el pasado 13 de mayo, el nivel se encontraba en 36.66 metros. 

“Si las escorrentías se mantienen con lluvia ligera, se evaluará el próximo martes cómo está nivel para poder hacer cualquier otra movida. Pero tiene que haber consistencia en esas escorrentías”, precisó. 

Mira la gráfica de los niveles de los embalses

La meta de la Autoridad es que Carraízo alcance los 38.5 metros o lo que representa llegar al nivel de observación para que se le supla a los abonados agua potable un día sí y otro no. 

“Estamos positivo y optimista de que en una o dos semanas podamos ir a Fase 1”, afirmó Muñoz. 

Este nuevo panorama para los abonados de Carraízo surge luego de que una onda tropical que pasó ayer, martes, sobre la Isla provocara que los embalses en peor estado, Carraízo y La Plata, continuaran su ritmo ascendente. 

El cuerpo de agua más beneficiado fue Carraízo, que acumuló entre 2.5 a tres pulgadas de lluvia en un sector al norte de la cuenca, detalló el meteorólogo José Álamo, del Servicio Nacional de Meteorología (SNM). 

Las escorrentías que ya han comenzado a llegar a la represa, en Trujillo Alto, provocaron que a las 5:00 a.m. el embalse subiera 20 centímetro. Este aumento se dio a pesar de que la Zona A tenía servicio de agua potable como parte del modificado plan de racionamiento de dos días sin servicio y un día con agua potable.

Según el informe diario del nivel de los embalses, publicado por la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) a las 5:00 a.m., Carraízo se encuentra en el penúltimo nivel de uso, el de ajustes operacionales, con 37.17 metros. 

Su recuperación desde el pasado jueves, previo al paso cercano de la tormenta tropical Erika, ha sido de 2.98 metros. 

El nivel óptimo de Carraízo es de 41.14 metros, por lo que el embalse le falta acumular 3.97 metros para estabilizarse de la sequía extrema que afecta a su cuenca. 

La Plata todavía continúa en estado crítico – Subtítulo 

La Plata, por otro lado, se ha quedado como el embalse en peor estado a causa de la sequía extrema que afecta a su cauce. Es el único que permanece en el último nivel de uso, el de control, pese a que desde el pasado jueves solo registra aumentos en su nivel. 

Esta madrugada, el embalse aumentó 18 centímetros, gracias a que cayó una pulgada de lluvia al norte de la cuenca. Se ubicó en 36.65 metros. 

El nivel óptimo de La Plata es de 51 metros, por lo que le faltan 14.35 metros para recuperarse. 

Por lo pronto, desde el pasado jueves, previo al paso cercano de la tormenta Erika, La Plata ha logrado aumentar 1.94 metros. 

Los 180,000 clientes de este embalse, residentes de Bayamón, Guaynabo, Toa Alta, Toa Baja, Cataño, así como sectores de San Juan, Corozal, Naranjito y una urbanización de Dorado, están en un plan de racionamiento de dos días sin servicio y un día con agua potable. Ayer, martes, ninguna zona de La Plata tuvo servicio de agua potable.

En cuanto a los demás embalses, sepa que Cerrillos, en Ponce, fue el que más agua acumuló en las pasadas horas. Su aumento fue de 38 centímetros. Le siguió Río Blanco, en Naguabo, que acumuló 23 centímetros. En esta última cuenca cayeron alrededor de tres pulgadas de lluvia gracias a la onda tropical.

Asimismo, se destaca del informe del nivel de los embalses de la AAA que Patillas; Toa Vaca, en Villalba; Carite, en Guayama; Caonillas, en Utuado, y Guajataca, en Quebradillas, mostraron descensos en sus niveles de entre uno a ocho centímetros.