Ante el paso de la tormenta Erika por la Isla, unas 40 personas llegaron hasta el refugio en la Escuela Ernesto Ramos Antonini, donde el Departamento de la Vivienda les está ofreciendo servicios de alimentos y de salud. 

La administradora Meledy Medina explicó que el refugio abrió la tarde del jueves y hasta el momento atiende a 32 hombres, cinco mujeres, dos personas con impedimentos y un menor. 

“La mayoría son personas sin hogar que deambulan por las calles de Ponce”, comentó la funcionaria, quien no descartó que puedan llegar más refugiados si las condiciones del tiempo empeoran. 

“No tengo casa y el viento y la lluvia estaban fuertes”, comentó Gloria Adela Sepúlveda. 

Esta destacó que permanecerá en el lugar hasta que se sienta segura para regresar a la calle. 

Del mismo modo, Olga Irizarry, de Coto Laurel, fue transportada junto a su esposo porque su vivienda está en malas condiciones. 

“Tenía miedo que el techo me cayera encima, cogí mis papeles y salimos”, expresó la mujer de 65 años.

Según informó la Policía más temprano, en toda la región amanecieron 96 personas en los refugios de Ponce, Juana Díaz, Guánica, Peñuelas, Yauco y Guayanilla.

En Juana Díaz, específicamente en la escuela Máximo Donoso, del barrio Sabana Llanas, se refugiaron 20 personas, entre estos un infante de menos de tres meses, cuatro niños, tres adolescentes, 10 adultos y dos envejecientes.

Mientras, en Guánica había cinco refugiados, entre los que se encontraba un anciano. Estos pernoctaron en la escuela Luisa McDougal, ubicada en la calle 65 Infantería.

En la escuela Adolfo Grana, en Peñuelas, solo había un envejeciente refugiado. 

Asimismo, en el coliseo Raúl Pipote Oliveras de Yauco se refugiaron tres niños, un adolescente y cuatro ancianos. 

En la escuela Segunda Unidad del barrio Macana, en Guayanilla, se reportaron otros 20 refugiados, entre los que había tres infantes menores de tres meses, un niño y siete envejecientes. 

“No se ha informado de inundaciones o deslizamientos al momento”, destacó la Policía. 

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