Aguadilla. Consternados la directora y los maestros de Yamilca, con el fallecimiento de la niña luego de golpearse la cabeza al caer de su cama en la madrugada del martes.

El jefe del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Aguadilla, el capitán Julio C. Pérez, dijo que se investiga como un incidente desgraciado el caso en que perdió la vida la estudiante de 11 años Yamilca Castro Chaullisant.

El incidente ocurrió en la residencia de sus abuelos Carmen María Mercado y José Santiago Casiano, quienes mantenían su custodia legal en la calle Reguero del sector La 15 en el casco urbano de Aguadilla, a pocos pasos de donde la adolescente cursaba el cuarto grado en la escuela Carmen Gómez Tejera.

La menor se cayó de su cama a eso de las 4:30 de la madrugada, y fue llevada por sus abuelos al hospital Buen Samaritano de Aguadilla, donde el doctor Mario García le diagnosticó trauma cerebral, por lo que fue transferida en condición crítica al Hospital Pediátrico de Río Piedras en ambulancia aérea. No obstante, la niña arribó sin vida.


“La entrevista con el médico que la atendió, la abuela que tiene su custodia legal y sus hermanas menores, además de lo investigado al momento, entendemos que estamos frente a un caso de incidente desgraciado, pero ahora habrá que esperar que se le practique la autopsia para determinar las causas de la muerte’’, indicó el capitán Pérez.

Mientras, Darisabel Rodríguez, directora de la escuela Carmen Gómez Tejera, así como las maestras Adelfina Hernández, Linnette Cabán y Aida Estrada, quienes les daban clases de salud, español y salón hogar a Yamilca, apodada “la Barbie” en el plantel escolar, la describieron “como lo mejor de la cosecha’’.

“Estamos todos muy consternados, son una familia grande, humilde, pero muy buena, que cuidan mucho las nenas, las protegen y siempre las están cuidando’’, dijo Hernández al destacar que son tres niñas, dos de cuarto grado y otra de sexto, cuya abuela las lleva a la escuela y se queda todo el tiempo velándolas en el patio.

Incluso, Hernández dijo que los abuelos son tan estrictos con las niñas, que si ellos no iban con ellas a las excursiones que se hacían de la escuela, las menores no podían asistir a las mismas.

“Se le quería dar el examen de reubicación, pero como ella era tan humilde, prefirió quedarse en cuarto grado para estar con su hermanita’’ añadió la profesora Hernández.