Una vista ocular de la Comisión de Salud de la Cámara de Representantes llevada a cabo este jueves pudo constatar que el Hospital de Psiquiatría General Dr. Ramón Fernández Marina ha tomado las medidas para corregir una serie de situaciones que afectaban a la institución médica y que habían sido denunciadas públicamente.

La vista, que fue parte de una resolución cameral, estuvo liderada por el representante Juan Oscar Morales Rodríguez e incluyó a líderes del hospital y otras agencias como el Departamento de Salud y la Administración de Servicios y Seguros de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca).

A preguntas del representante Morales, la Administradora de Assmca, Suzanne Roig Fuertes, comentó que desde que al asumir el cargo ciertamente había unas situaciones que tuvieron que atender como una grieta con un desnivel alrededor de la sala de emergencias así como el mal estado de los gacebos. Explicó que el edificio, de unos 90 años, no tenía planos actualizados lo que complicaba las labores. Agregó, no obstante, que ya se habían corregido esos problemas.

Roig agregó que también había unas situaciones de seguridad que necesitaban ser atendidas como la presencia de puntos de riesgo de ahorcamiento, así como otros puntos que podían representar peligro como el área de restricción de las camas o las maniguetas de las puertas de los baños. Asimismo, había otros problemas relacionados con la planta física del viejo edificio que necesitaban atenderse. La administradora de Assmca indicó que ya han podido corregir la mayoría de esas situaciones con la adquisición de materiales y equipos que incluso permitirán al hospital cumplir con requisitos para sus acreditaciones. Aún tenían pendiente instalar unas maniguetas de puertas que cumplan con exigencias de seguridad para instituciones siquiátricas, que ya fueron compradas.

De igual forma, se atendió el problema de hacinamiento en la sala de emergencias con la habilitación de una sala de espera y una sala de desahogo que añadieron camas disponibles en la institución. Otro cambio importante fue la adición de personal de enfermería, que permite ahora al hospital “contar con un patrón de enfermería completo”.

Roig añadió que también trabajaron con el “señalamiento histórico” del movimiento de pacientes, algunos de los cuales no tenían familia y terminaban viviendo en el hospital a pesar de dársele de alta. A tales efectos se trabajó con el sistema de hogares y con el Departamento de Familia para reubicar a muchos de los pacientes que estaban viviendo en el hospital.

Gran parte de los trabajos en el hospital tiene también la meta de volver a tener la certificación de Medicare. No contar con esa certificación le cuesta millones a la institución.

“Me voy muy satisfecho de lo que he visto allá adentro, desde la limpieza, el servicio de los empleados hacia los pacientes”, dijo el representante Morales tras concluir el recorrido por el hospital. “Solamente pudimos identificar lo que ya la administradora de Assmca nos había anticipado en su ponencia con relación a los baños, que no cumplen con la seguridad que se requiere”.

“Se ha estado trabajando arduo. Las cosas que se pudieron observar las reportamos. Están en nuestros planes de trabajo. Son equipos que no han llegado a Puerto Rico, pero que ya están comprados”, aseguró Roig.