A pesar de que la antigua tradición del Día de la Candelaria en Puerto Rico transcendió en años recientes para convertirse en una práctica ligada al consumismo moderno donde se hacen fogatas para disponer del árbol de Navidad, sepa que esta práctica podría constituir un delito si causa daño físico y material y podría conllevar pena de cárcel hasta de 8 años.

Ángel A. Crespo, jefe del Cuerpo de Bomberos de Puerto Rico, explicó que esta práctica, aunque con fuertes raíces culturales en la Isla, es un atentado contra la seguridad colectiva según indica el Código Penal de Puerto Rico.

"Esta práctica puede constituir un delito porque puede convertirse en un riesgo para la seguridad del público. Febrero 2 marca el inicio de la temporada de fuegos forestales para nosotros y constituye un riesgo que el público haga fogatas porque estas pueden convertirse en fuegos forestales de grandes proporciones que, inclusive, le puedan costar la vida a personas inocentes", explicó el Jefe de ese cuerpo.

Según lee el artículo 232 del mencionado código, "toda persona que incendie montes, sembrados, pastos, bosques o plantaciones ajenas, será sancionado con pena de reclusión por un término fijo de tres años", y más adelante indica que cualquier persona que, ocasionando un incendio de esta índole le causara daño a las personas, tendría un término de reclusión fijo de ocho años.

"El hecho de que haya una celebración religiosa y cultural no es motivo para nuestra intervención pero si es nuestra labor orientar a la ciudadanía sobre prevención de incendio. Inclusive, hemos tenido iglesias que nos han notificado que necesitan nuestra presencia para cualquier actividad religiosa que incluya velas y nosotros con mucho gusto acudimos", añadió Crespo aunque admitió que la tradición del Día de la Candelaria ya no es celebrada con la frecuencia que en décadas anteriores.

"Precisamente, el día 2 vamos a tener una conferencia de prensa para informar al público sobre el comienzo de la temporada de fuegos forestales y cualquier fogata de estas es un riesgo de crear un incendio forestal o, en lugares urbanos, un incendio en residencias y locales que podría costar vidas humanas", recalcó el jefe de bomberos.

Crespo indicó además que una de las medidas administrativas que se tomarían para ese día sería la suspensión de días compensatorios.

"Ese día tomamos la precaución de asegurarnos de que todo nuestro personal esté activo y se reporten a trabajar, por eso suspendimos todos los días compensatorios", indicó el bombero con 18 años de experiencia.

"El llamado a la ciudadanía es que se abstenga de realizar esta práctica porque es una muy peligrosa y podría tener consecuencias fatales", añadió.

Van a intervenir

Crespo aseguró además que el Cuerpo de Bomberos intervendrá con cualquier persona que sea encontrada realizando alguna fogata ese día y exhortó a la ciudadanía a también denunciar esta práctica.

"Nosotros podemos y vamos a intervenir pero el público también puede poner de su parte. Durante el fuego del Bosque Modelo en Adjuntas el año pasado se despertó la consciencia de las personas y, meses después, una señora agarró a un individuo provocando un incendio y se le fue detrás, le tomó la tablilla y el hombre fue procesado", recordó.

"Este tipo de regulaciones es importante pero yo apuesto a la consciencia del pueblo de Puerto Rico a que van a evitar estos fuegos", añadió a la vez que indicó que el año pasado fueron registrados 1034 fuegos forestales menos que en 2013.