Desde familiares, amigos, pacientes y sobrevivientes de cáncer, así como personas que solo la conocieron a través de los medios… eran bien diversas las personas que hoy acudieron al velorio de Kesia Rivera, en la Funeraria Borinquen de Caguas.

Kesia, de 37 años y madre de cinco hijos, falleció el lunes a causa de un cáncer  que comenzó en uno de sus senos y se le regó por  varios de sus órganos.

Las personas se acercaban al ataúd y coincidían al decir que ahora la mujer está por fin descansando como merece, luego de luchar tanto.

Un hombre que también padece la enfermedad y que la conocía desde hacía algunos años se levantó de su silla de ruedas para ofrecerle sus respetos.

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“Yo me llevaba con ella porque ella siempre tenía un gran positivismo, hablábamos mucho y ella siempre me decía que yo no podía echar para atrás ni pa’ coger impulso”, declaró el individuo quien prefirió no identificarse.

Keila Rivera una de las hermanas mayores de Kesia observaba las fotos que se dio a la tarea de recopilar en la que se puede ver la triste transformación física por la que pasó. Sin embargo, en la mayoría Kesia aparece sonriendo.

“Varias veces después de coger quimioterapia ella insistía en acompañarnos a vender bizcochos, que fue una de las cosas que hicimos para recoger fondos. Una vez incluso me dijo, a mí me da pena tener que pedirle a otra gente. Y yo le respondía que no estábamos pidiendo por pocaverguenza, sino porque ella necesitaba para sus medicamentos”, recordó.

“Definitivamente fue una luchadora”, dijo su tía materna Daisy Olivieri.