El incidente en el que una tubería de extinción de fuegos explotó hoy a las 4:15 de la madrugada en momentos en que terminaba una fiesta de despedida de año en el hotel Caribe Hilton, no pasó de ser un gran susto.

Así lo informó el gerente general del hotel, José Campo, mientras todavía brigadas de limpieza laboraban para secar el área del recibidor que conduce a los salones principales del ball room San Gerónimo.

“Una yunta del tubo de agua para apagar incendios se rompió por alguna vibración o por alguna otra razón y el agua comenzó a salir a presión y nos tardó de unos 10 a 15 minutos cerrar la válvula. Pero no pasó nada grave o mayor. No hubo heridos y todas las personas desalojaron el área instruidos por seguridad en orden hacia el jardín por las múltiples puertas que hay en el área. No hubo gente ataponada”, dijo Campo.

Anoche el hotel estaba lleno a capacidad y se estima que unas 2,000 personas pudieron haber estado en el área que se vio afectada por el agua que alcanzó en algunos lugares las tres pulgadas.

“Afortunadamente la fiesta terminaba a las 4:30 a.m. y ya estaba en su fase final. Ya se había servido un arroz y ya se estaba acabando el evento. Cuando las persona salieron se les ofreció el desayuno continental que estaba planificado”, expresó el gerente del hotel.

Todavía en el área VIP de la actividad se observaban estructuras de luces, sofás modernos y letreros que leían “Night of wonders”. Aunque pocos, quedaban jarras de tragos y en el área del lobby muchas personas locales hacían checkout.

Campo dijo que en estos días el hotel estaba lleno a capacidad máxima. El perfil del turista es norteamericanos, principalmente, pero la mayoría de las personas en la actividad fueron locales ya que a los puertorriqueños les gusta despedir el año en hoteles de forma elegante y con seguridad.