Comenzaron a comer y beber desde temprano en la mañana mientras las brisas templadas se filtraban por los riscos y las montañas. 

No era para menos. Se trataba de una gran fiesta, la celebración del primer aniversario de la Ruta de la Longaniza en Orocovis, y no había tiempo que perder para comenzar a descubrir los manjares de 16 restaurantes que forman parte de la famosa ruta gastronómica de la montaña. 

El reloj marcaba las 10:30 a.m. en Los Naranjos Restaurant, en el barrio Gato. Allí el olor del licor triple sec se mezclaba con los vapores de la carne de cerdo ahumada, una de las especialidades de la casa.  A esa hora algunos ciudadanos podrían estar tomando su último cafecito de la mañana, pero en Los Naranjos, la primera parada de la ruta, se servían caldos de pollo, pan de agua y cervezas heladas. 

“La Ruta de la Longaniza comienza aquí y es un evento espectacular. Viene gente de toda la Isla y aquí estamos para servirle a todos”, sostuvo el dueño del negocio, Wilson Jiménez, mientras atendía a familias que comenzaron a disfrutar de los platos de la ruta a media mañana.

La Ruta de la Longaniza, que cubre varias carreteras de Orocovis, se inauguró el pasado 30 de agosto de 2014 y se suma a una serie de iniciativas entre el sector privado y público para impulsar la economía del pueblo montañoso.

Funcionarios municipales, comerciantes, residentes de Orocovis y turistas de todo el país participaron en una “jeepeada” para celebrar el primer aniversario de la ruta. 

La actividad antecede al Octavo Festival de Longaniza, que tradicionalmente se ha celebrado el primer domingo de septiembre, pero que por primera vez se extenderá durante todo un fin de semana, entre el próximo sábado y domingo. La extensión de la fiesta del plato popular pretende aliviar la congestión vehicular y ampliar la oferta de los negocios que ofrecen una especialidad del embutido que ahora es buscando por turistas alrededor del mundo.

Pero la fiesta se compone de distintas facetas. El gusto culinario en ocasiones se posiciona en un segundo plano cuando el deseo de compartir, charlar y reír se convierte en el motor de la celebración. El chinchorreo abre espacios para abrazar a viejos amigos, bailar y fiestar.

La caravana de vehículos todoterreno inició su marcha hasta la segunda parada, El Cafetín Los Amigos, ubicado en la carretera 155, en el barrio Percha. Allí se servían pinchos de longaniza con tostones a $8, mofongo relleno con longaniza a $6 y un plato de arroz con longaniza a $9. La música de salsa retumbaba mientras modelos con trajes promocionales de licores o cervezas asistían a los meseros.

Familias completas viajaron desde la zona metropolitana, entre otros pueblos, para darse el gustazo y probar diversidad de platos con longaniza. No había necesidad de kétchup, sal, mostaza, ni mayonesa, ya que la comida estaba impregnada de condimentos que estimulaban los sentidos. Para algunos comensales, la celebración se había transformado en una experiencia cultural, de hecho, algunos dirían que patriótica.  

“La ruta nos trajo mucho reconocimiento. Nosotros no nos anunciábamos y ahora nos conocen”, indicó Yazmín Díaz Mateo, de 32, gerente de Los Amigos. 

Algunos clientes subrayaron la importancia de patrocinar los negocios locales ante las cadenas extranjeras que continúan acaparando el comercio en Puerto Rico.  

“Esta actividad resalta los valores de la cultura puertorriqueña. No se puede menospreciar lo que es de aquí”,  indicó el ingeniero Lionel Marengo, quien visitó este negocio junto a su esposa y dos hijos de 22 y 17 años de edad. 

La ruta continuó por la tarde en el restaurante ToroVerde, en el parque ecológico que marca gran parte del auge turístico de Orocovis en años recientes. El negocio ofrece una experiencia más refinada del embutido, un risotto con longaniza por $21. El plato muchos clientes lo acompañan con una copita de vino banco, seguido por un flan de coco o un tembleque de la casa.

Para el alcalde de Orocovis, Jesús E. Colón Berlingeri, la ruta es un reflejo de lo que puede lograr una alianza entre el sector público y privado, ejemplo que pueden emular otros municipios para adelantar sus programas económicos. 

El Municipio de Orocovis también está en proceso desarrollar un proyecto turístico en el bosque Toro Negro que aumentaría las atracciones y razones para visitar este pueblo, anticipó Colón Berlingeri sin anticipar mayores detalles de esa iniciativa. 

“Nosotros queremos promocionar nuestra industria turística. Tenemos que ser creativos. Es una iniciativa de los comerciantes y de nuestro equipo de trabajo”, señaló el alcalde orocoveño.

Además de Los Naranjos, Los Amigos y Toro Verde, en la ruta hubo paradas en los negocios La Terraza, Roka Dura, Green Town Bara, La Cobacha Criolla, Vagoneando, El Navideno, Sorbo's, Rufy's Pizza, Piketas, La Sombra, New Rico's Place y Bertito's Bar and Grill.

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