Un grupo de ingenieros de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) culminó este viernes una visita de varios días en Puerto Rico para ofrecer charlas a cientos de estudiantes y maestros que ayuden a impulsar el interés en el campo de la industria aeronáutica y aeroespacial.

Cuatro ingenieros puertorriqueños y una estadounidense recorrieron diferentes escuelas y universidades, antes de cerrar la estadía en la Isla con un taller para maestros del sistema público de enseñanza de varios municipios. El mismo se realizó en el Museo de Vida Silvestre, en San Juan.

"Queremos que el maestro vea lo que hay y lo pase a sus estudiantes para que se sientan inspirados y nos ayuden a explorar, porque ellos son la próxima generación de exploradores", expresó el boricua Lester Morales, coordinador educativo de la NASA para las regiones de Florida, Georgia, Puerto Rico e Islas Vírgenes.

"Necesitamos la ayuda de ellos, porque de lo contrario NASA dejará de existir", agregó.

Durante las charlas y talleres a cerca de 650 estudiantes y 150 maestros esta semana, los ingenieros prestaron especial énfasis en explicar los diversos esfuerzos en los que trabaja la NASA para llevar una nave con astronautas hasta Marte en el año 2030.

Estiman que, por el tiempo que falta, es posible que desde la tripulación hasta el equipo de personas que laborarán en el proyecto para el momento de la travesía incluya futuros profesionales que actualmente se encuentran en edad escolar.

Por esta razón, la NASA maneja diversas iniciativas para desarrollar el interés en los niños y jóvenes. En Puerto Rico, su visita surgió como parte de la afiliación del Departamento de Educación al Space Grant Consortium-NASA, se dijo.

"El cierre de toda esta jornada nos da a entender la necesidad que hay en la Isla de traer programas como este para que el estudiante sepa que hay un lugar para ellos en NASA", comentó Morales.

"Si estudian, se esfuerza y sacan buenas notas, y ponen todo ese trabajo y esfuerzo pueden llegar como los cuatro ingenieros que traímos, que son producto de escuelas públicas y privadas", agregó.

Los maestros que participaron del taller en San Juan construyeron cohetes pequeños que se pueden elevar hasta 1,000 pies de altura y armaron estaciones de despegue con sorbetos. Entre otras actividades, aprendieron sobre herramientas -como aplicaciones y páginas de Internet- de la NASA que se pueden usar en el salón de clases.

"Fue espectacular y enriquecedor, para llevar todas esas experiencias al salón. Ayudan a pensar un poquito fuera de la caja para que los estudiantes puedan progresar rapidito", manifestó Myrelis Díaz, maestra de ciencias terrestres y química en el Centro Residencial de Oportunidades Educativas de Villalba (Croev).

La NASA no sólo busca ingenieros. Según el boricua Alex Bengoa, en la agencia aeroespacial hay sobre 200 áreas profesionales en las que se puede trabajar.

"Allí tenemos científicos, físicos, cocineros para astronautas, astronautas, pilotos… es increíble", señaló Bengoa, ingeniero mecánico natural de Aguada y quien actualmente trabaja en la importante área de integración de la NASA.

"Soy del sistema público y graduado de la UPR de Mayagüez en 1991. Por los últimos 25 años he trabajado en la NASA, en el Kennedy Space Center, y lo que quiero demostrar es que todo es posible", agregó. "Es cuestión de luchar por el futuro que quieres".

Bien cotizados en la NASA los ingenieros boricuas

Durante el conversatorio, se destacó que los ingenieros puertorriqueños son bien cotizados en la NASA.

"Tenemos muchos puertorriqueños. Tenemos muchos ingenieros y mantenemos un programa de colaboración con la Universidad de Puerto Rico, así que recibimos muchos estudiantes de puertorriqueños y estamos emocionados de tenerlos", dijo la ingeniero estadounidense Jennifer Levitt, especialista en el programa desarrollo de sistemas terrestres y operaciones de la NASA, quien acompañó al grupo en su visita a la Isla.

Por su parte, el boricua José Mayí, ingeniero en diseño y análisis, destacó que en la NASA, "cuando dices que eres ingeniero de Mayagüez, la gente sabe de dónde vienes. Los puertorriqueños tienen buena reputación y muchos de ellos son jefes con años de experiencia".

"He tenido también la oportunidad de estar en la empresa privada y te puedo decir que es gratificante trabajar en la NASA, porque se siente que estás trabajando para algo que es más grande que uno", indicó Mayí.

"No es por minimizar otros trabajos, pero uno siente que contribuye al beneficio general, al conocimiento y exploración de la humanidad", afirmó.