La portavoz de la cadena de pizza Domino’s, Carmen Cedré, informó hoy de que cuatro de sus tiendas están en un proceso de transición conocido como patrono-sucesor al que no le aplica el marco legal de la nueva reforma laboral.

Por lo tanto, los empleos y los beneficios de sus empleados permanecen bajo el marco legal en el que fueron contratados.

Cedré explicó que esta subfranquicia presentó una solicitud de quiebra en diciembre de 2015. Posteriormente, en el 2016, la subfranquicia decidió hacer liquidación debido a las deudas y la crisis económica que enfrenta el país. Ante esta situación, el tenedor de la franquicia, Domino’s, determinó asumir las operaciones de esas cuatro tiendas para evitar la pérdida de empleo y el cierre de operaciones.

“Esas decisiones que se toman el año pasado, no tienen nada que ver con la reforma laboral”, expuso Cedré en entrevista telefónica con Primera Hora.

A través de una carta entregada el pasado viernes, se les informó a los empleados de las cuatro tiendas que debido a unas “decisiones internas” pasarían a ser dirigidos por otra compañía. Uno de sus empleados, Nelson Rivera, expuso que había sido informado, a solo días de firmarse la reforma laboral, de que tendría que presentarse a una nueva entrevista de trabajo si quería mantener su actual empleo.

“Parte del proceso es conocer a esos empleados y por eso se inicia el proceso de entrevistas para entender quiénes son los empleados y llenar requisitos de ley… La nueva empresa actúa como patrono sucesor, toma las riendas de la operación que iba a cerrar y a todos los empleados se les respeta sus derechos y acuerdos laborales, salario, vacaciones, beneficios, en el momento de su contratación. Para nada tiene que ver con la reforma”, agregó.