En un acto que puso en juego la salud de una comunidad y que se llevó el repudio de varios sectores, una empresa dejó caer en la carretera, de forma ilegal, aguas usadas de una escuela en Adjuntas. 

La Junta de Calidad Ambiental (JCA) expidió ayer tres multas administrativas, que juntas suman $6,000, en contra de la compañía Guaynabo Destape Inc. por incumplir con reglamentos ambientales de la agencia.

La empresa se dedica a recolectar y transportar desperdicios sólidos no peligrosos. Pues resulta que  vació de forma inadecuada aguas usadas entre varios camiones tras sacarlas de la escuela Francisco Petri Mariani, ubicada en el barrio Guillarte, en Adjuntas. 

Los hechos habrían ocurrido el martes, 21 de marzo cuando Guaynabo Destape, cuyo propietario es Ramón Villegas, realizaba trabajos en el plantel escolar.

Según se desprende de la investigación realizada por personal técnico de la JCA, empleados de la compañía dejaron el camión tanque en la entrada del barrio Guillarte, pues las carreteras del sector y el tamaño del vehículo impedían la entrada del equipo hasta la escuela.

Luego de dos viajes, en donde un camión más pequeño extraía las aguas usadas, los empleados de Guaynabo Destape se percataron que la válvula del vehículo principal estaba abierta, lo que provocó que las aguas usadas se derramaran en el terreno. 

La denuncia se presentó el martes pasado y en menos de 72 horas la JCA emitió la orden con las multas administrativas. 

Como resultado de la inspección, la JCA encontró  que Guaynabo Destape violó las condiciones de sus permisos al  no  tomar las precauciones necesarias para que no se derramaran los desperdicios sólidos no peligrosos y no contar  con un vehículo  diseñado de forma tal que el desperdicio quedara completamente encerrado y tapado. También incumplió  al descargar los desperdicios en un lugar no autorizado.

Además de las tres multas, la JCA   ordenó a Guaynabo Destape el cese y desista de causar o permitir la práctica de disponer desperdicios sólidos no peligrosos en predios no autorizados por la JCA y que la empresa desista de incumplir las condiciones del permiso. 

De incumplir, la JCA podrá multar a la empresa con $25,000 diarios hasta que la compañía cumpla con todo lo requerido, se informó.  

El alcalde de Adjuntas Jaime Barlucea y el portavoz del Bosque Modelo Casa Pueblo y microbiólogo Arturo Massol aplaudieron que la JCA tomara medidas  pero indicaron que las sanciones deberían ser más severas.

“Lo más doloroso es que esta semana se celebró el día del agua a nivel mundial y siendo Adjuntas uno de los que le da agua a más de 45 municipios, que estuviéramos pasando por esta situación, es lamentable. La Junta de Calidad Ambiental debe emitir multas más severas para crear consciencia”, declaró Barlucea.

Aunque el acceso al área de la escuela era reducido, el alcalde afirmó que eso no era excusa para que la empresa incumpliera.

“Vamos a estar pendiente, si vemos algún camión como este con personal nuestro, sea con la policía municipal o de manejo de emergencia, vamos a estar pendiente para tajar cualquier atentado contra el ambiente”, afirmó.

 Por su parte, Massol catalogó el acto de la compañía como una “ofensa a  un recurso vital del país y un acto de corrupción corporativa”.

“Lo que ocurre cuando se dan hechos como éste es que se levantan muchas interrogantes de si fue la primera vez...  y cuánto fue la magnitud de lo que ocurrió... pero el mensaje tiene que ser claro para que esto no se repita; ese tipo de multa tiene que ser mucho más alta, de lo contrario  es como una apuesta: en esta los cogieron pero quién sabe cuantas veces lo hacen”, indicó.

Massol además felicitó a la comunidad que dio la voz de alerta e hizo un llamado a la gente a defender sus recursos.