El productor y director de un documental sobre la penosa y vergonzosa realidad de los animales abandonados en el país considera que “vamos a necesitar una generación completa” para ver un cambio positivo sobre esta problemática que tiene, entre sus detonantes, al machismo.

Hace unos años Juan Agustín Márquez se tiró a la calle con un pequeño equipo para grabar “100,000”, un documental presentado en la televisión pública de 14 países.

“Hicimos este documental con la esperanza de no solamente exponer la situación grave de animales realengos y abandonados, sino para enseñar y demostrar la importancia de la esterilización”, expresó el cineasta al añadir que la gente no entiende que es un deber de salubridad.

A Márquez le parece que en Puerto Rico se han acostumbrado a que los animales en la calle son parte del paisaje y solo se dan cuenta de que existe un problema “cuando salen y ven que en otros países no hay”. “Las personas no están conscientes de la sobrepoblación”.

El machismo, responsable de muchos males sociales, también parece estar de fondo en el rechazo a la  esterilización de las mascotas, la obvia alternativa para detener aumento de animales.

“Las personas proyectan su masculinidad en el animal, ven que quitarles los testículos es hacerlos menos perros o menos gatos; o están dispuestas a esterilizar a la hembra pero no al macho”, dijo basado en la información que obtuvo al grabar el documental que ganó un premio Emmy.

Aun cuando la esterilización pueda ser cubierta por los responsables de la mascota, mucha gente no tiene claras las consecuencias de no hacerlo. “Muchos hombres piensan que esterilizar el animal es abuso”, expresó y aclaró que no lo hacen por maldad. “Creo que se ha creado conciencia, pero para ver un cambio en la calle hace falta una generación completa, hace falta como 15 o 20 años más”, reflexionó.